“TENÍA QUE SER ELLA”
Jota Linares, que en otoño publicará su primera novela, abre su corazón al hablar de su tercer largometraje como director. Necesitaba contar la historia de alguien a quien de repente se le presenta la oportunidad de su vida y, por el miedo al fracaso, la presión o el síndrome del impostor, eso se convierte en una pesadilla. Así me sentí con mi primera película, Animales sin collar (2018) y eso quería trasladar en esta. Descarté ambientarla en el mundo del cine para no desnudarme demasiado, y elegí el de la danza porque me apasiona. Además, la competitividad que hay en el cine, se multiplica por mil en esta disciplina. Ninguna duda tuvo sobre la elección de la protagonista, a quien ya había dirigido: Escribí el guion pensando en María, quería a una actriz con la que me entendiera porque su personaje iba a experimentar lo mismo que yo. Y que tuviera buen nivel de ballet, lo que no sabía es que fuera tan alto. Era perfecta para el papel.