“HAY PELÍCULAS QUE NO TIENEN UN MINUTO DE CINE”
‘Cerrar los ojos’. Víctor Erice, cineasta de culto, autor de solo tres largos: ‘El espíritu de la colmena’, ‘El Sur’ y ‘El sol del membrillo’, habla sobre su último trabajo, en el que vuelca sus reflexiones sobre el cine, la memoria, la identidad y la vida. Por L. Pérez.
DE QUÉ VA: Miguel Garay es un director de cine en busca de Julio Arenas, su amigo y actor que desapareció 30 años atrás, dejando inacabada la película que ambos rodaban.
Un regreso mítico. En realidad, nunca me fui. Aclara Víctor Erice sobre este regreso, 30 años después de su último largometraje, El sol del membrillo. En estos años he seguido filmando. He producido cortos, mediometrajes, videoinstalaciones… No he dejado de ejercer como cineasta. A menos que se piense que lo único que cuenta, aquello que otorga un aval de existencia, sean las reglas que dicta el régimen Audiovisual. Y aquí, en este término –en mayúscula– se encuentra el nudo gordiano de las reflexiones de Erice en torno al cine. Muchas de ellas desgranadas en Cerrar los ojos, donde rinde homenaje a este arte crepuscular que se rodaba en celuloide, se montaba en moviola y se disfrutaba en viejas salas. Desde hace tiempo uso el vídeo y la imagen digital. Ahora bien, en mi opinión, el Audiovisual no continúa el cine. Supone una quiebra […]. Lo que se denominó ‘el lugar del espectador’ no existe. Y en un rodaje hoy en día, al amparo del desarrollo tecnológico, por lo general ya no se trata tanto de capturar una imagen como de fabricarla. Consecuencia: el lado artesanal del cine –un tesoro– está desapareciendo. Cerrar los ojos nació hace años como un relato sobre la desaparición de un actor durante el rodaje de una película. Con esta excusa, Erice reflexiona sobre el cine como herramienta de memoria y descubrimiento. A la pregunta de si continuará ejerciendo este papel, explica: Distingo entre el cine y las películas que se hacen. No son lo mismo. Hay una cantidad ingente de películas que no contienen ni un minuto de cine.
Socialmente, el Audiovisual, sobre todo a través de las plataformas, ha convertido las películas en un entretenimiento de masas a escala planetaria. Con excepciones, es una cualidad que se da más en películas que brotan en la periferia del sistema. En estos márgenes se sigue moviendo como espectador. Continúo siendo un devoto de las salas. Pero hay películas muy interesantes, que tengo que ver en mi casa, ya que no han encontrado distribución. ◆ ESTRENO: 29 SEPTIEMBRE
Cerrar los ojos (España, Argentina, 2023, 169 min.). DRAMA.