LO QUE PASA EN EL VECINDARIO SE QUEDA EN EL VECINDARIO
‘Vidas perfectas’ confirma lo que decía el poeta estadounidense Robert Frost: ‘Buenas vallas, buenos vecinos’. Lo que ocurre cuando se cruza ese límite se ha contado en thrillers, comedias y dramones residenciales.
1. ‘El nadador’ (F. Perry, 1968)
Burt Lancaster siempre insistió en que era la mejor película de su carrera, adaptación del cuento de John Cheever que traza un vínculo onírico entre el país y sus piscinas mientras un hombre trata de no ahogarse en el sueño americano.
EL MEJOR MOMENTO
El travelling inicial con el que Frank Perry (antes de ser sustituido por Sydney Pollack en la dirección) ejemplifica el devenir de una bellísima, trágica y quimérica fábula moral.
2. ‘Las esposas de Stepford’ (B. Forbes, 1975)
La semilla de Ira Levin empapa de escalofríos esta adaptación de su novela ambientada en un pueblo de Connecticut: la trampa perfecta para la mujer que escapa de Manhattan buscando una vida más tranquila.
EL MEJOR MOMENTO
Katharine Ross, en el papel que rechazó Diane Keaton, verbaliza su temor: que pronto será reemplazada por una cosa con su nombre, que se parece y habla como ella.
3. ‘E.T., el extraterrestre’ (S. Spielberg, 1982)
La síntesis definitiva de Spielberg sobre la disfunción familiar y la cicatrización de heridas provocadas por el abandono o la injusticia ocurre en los suburbios de California. Toda una oda a los sueños de la infancia frente a la cruel realidad.
EL MEJOR MOMENTO
Mientras pasea por el barrio en Halloween, E.T. se encuentra con el mismísimo Yoda. George Lucas devolvería el favor en 1999 con un cameo de E.T. en La amenaza fantasma.
4. ‘Terciopelo azul’ (D. Lynch, 1986)
Misterio y romance protagonizan este cruce entre terror psicológico y film noir. Nadie como Lynch para capturar un hipnótico sueño febril sobre la malicia humana. ¿La moraleja? Si encuentras una oreja en el suelo, déjala ahí.
EL MEJOR MOMENTO
Dean Stockwell se vuelve totalmente hipnótico al ritmo del In Dreams de Roy Orbison, una balada cruda y en duermevela que abraza lo grotesco de lo onírico.
5. ‘No matarás… al vecino’ (J. Dante, 1989)
Un desatadísimo Tom Hanks lidera la paranoia residencial tras escuchar ruidos extraños en la casa de al lado. El suspense cómico se contonea en este festival de gags, ritos satánicos, guiños cinéfilos y secundarios juguetones.
EL MEJOR MOMENTO
El zoom al habitante más travieso (y maruja) de Mayfield Place, un caniche interpretado por el mismo perrete que hizo de Preciosa en El silencio de los corderos (J. Demme, 1991).
6. ‘Adosados’ (M. Camus, 1996)
El desencanto se abre paso en una urbanización a las afueras de Madrid, donde Antonio Valero y una bergmaniana Ana Duato protagonizan un festín de verdades a medias que revelan las (muchas) grietas de su matrimonio.
EL MEJOR MOMENTO
Cuando Valero, en el papel de mentiroso compulsivo, conoce al vecino ruso antes de la acusación. A veces viene bien desahogarse, incluso si el otro no entiende tu idioma.
7. ‘La tormenta de hielo’ (A. Lee, 1997)
La liberación sexual aterriza en un asfixiante pueblecito de Connecticut marcado por el hastío de los años de Nixon, donde dos familias de vecinos se enfrentan a los cambios por medio de alcohol, adulterio y Acción de Gracias.
EL MEJOR MOMENTO
El emotivo acto final hizo que Rick Moody, autor de la novela en la que se basa la cinta, rompiese a llorar. Brian De Palma también se declaró amante de esta familia disfuncional.
8. ‘American Beauty’ (S. Mendes, 1999)
Kevin Spacey protagonizó la ópera prima de Sam Mendes en uno de sus papeles más controvertidos, sátira de la vida suburbana idílica en la que un padre de familia decide solucionar su crisis de los cuarenta con conductas pedófilas.
EL MEJOR MOMENTO
El vídeo de la bolsa de plástico fue inspirado por una vivencia real del guionista, que trazó aquel inolvidable monólogo originalmente concebido como obra de teatro.
9. ‘Las vírgenes suicidas’ (S. Coppola, 1999)
El extrarradio de Detroit es uno de los testigos de esta inquietante tragedia americana, basada en la novela de Jeffrey Eugenides. Ni siquiera el psiquiatra (Danny DeVito) pudo frenar la arriesgada conducta de las hermanas Lisbon.
EL MEJOR MOMENTO
La clase media periférica se retrata en sutilezas visuales y narrativas. Entre ellas, la respuesta al primer suicidio, cuando lo primero que hacen es quitar la verja.