Experimenta LA nouvelle vague
Este verano tenemos una cita chez Agnès Varda. Pasen, vean y disfruten de la auténtica cultura gala. army
Descubrí el peculiar estilo ‘cinescrito’ de Agnès Varda con el documental Daguerréotypes. Entendí la fuerza de sus heroínas de la mano de Cléode5à7 y
me enamoré de su vanguardismo vital
a través de Les créatures; un sentimiento de admiración que resurge este año, gracias a su nueva y genial aportación a la cultura europea. A sus 87 años, la directora de cine ha decidido abrir, junto a su hija Rosalie,
las puertas de la Maison de l’aiguebrun (Provenza),
su casa de campo familiar. ¿El plan de acción Varda? Transformarla en un hotel efímero dedicado al cuidado del cuerpo y la mente, según los códigos del hedonismo “truffiano”: sesiones de cine, a ritmo de Godard y los hermanos Dardenne; conciertos al aire libre; lecturas cantadas de Kiki de Montparnasse; clases de yoga matinales; cocina de autor, elaborada con ingredientes del terroir, etc.
Una burbuja intelectual y sensorial
por la que ya ha pasado parte de los socialité cultural parisina y que
ELENA R. BALLANO
Redactora
permanecerá abierta hasta el 20 de septiembre. ¿Mi recomendación para todos aquéllos que no podremos dormir este verano chez Agnès? Recuperar alguna de sus cintas y admirar, desde la distancia del sofá de casa, la genialidad de esta narradora de realidad en 35 mm.
¡Larga vida a la Reina de la Nouvelle Vague!