Tu nuevo GPS (Gestión del Placer Sexual)
Huir de la rutina, decidir si quieres ser activa o pasiva o establecer tus propios límites. En el sexo, tú eliges la mejor estrategia para que el placer sea también tuyo.
Seguramente tengas que echar mano del GPS para que te indique cuál es el mejor camino para llegar a tu destino aunque te imagines que vas en tu coche conduciendo sin rumbo fijo. Pues en el sexo pasa algo similar, de ahí la importancia de que seas tú quien gestione el placer para que nadie ni nada te diga cómo vivirlo y que decidas de forma independiente cuándo y hasta dónde estás dispuesta a llegar. ¡Que comience el viaje!
Mi vagina es mía. En su último libro Cómo triunfar en la cama, la periodista Marian Benito explica, entre otras cosas, cómo la mujer se está liberando de todos esos corsés que la convirtieron en una presa y le han impedido disfrutar de su sexualidad. “Sabe que puede seducir con independencia de su cuerpo o de sus facciones, sabe ser sensual, coquetear y lanzar mensajes, además, está abierta a nuevas prácticas sexuales que antes le estaban de alguna forma vetadas.” Despierta tu deseo sexual. Por eso es tan importante establecer tu propia estrategia y perder el miedo a arriesgar, a innovar y a tomar las riendas de tu relación. Y es que un buen amante es ése que responde a tus expectativas, que se comunica contigo y que incluso apoya tus fantasías eróticas. También, que acepta tu cuerpo, tu feminidad y tu forma de comportarte en la cama. En una palabra, alguien en quien puedes confiar sin temer una respuesta negativa.
Tú pones los límites. Lo primero que tienes que saber es que el atrevimiento sexual no tiene que estar relacionado con el riesgo. Ser atrevido en la cama no significa tener relaciones con desconocidos ni hacerlo sin protección. Se trata de mantenerlo vivo y de vez en cuando experimentar cosas nuevas con el fin de enriquecerlo. Para la sexóloga Francisca Molero, directora del Instituto de Sexología de Barcelona, “lo importante es que se consensúe entre la pareja, pero eso es sólo posible si tienes
una autoestima sexual adecuada. En una relación puede haber objetivos e intereses diferentes, cada persona tiene unos códigos, morales o éticos, y a veces no sabemos identificarlos. No puedes pasártelo bien si no piensas en ti, si estás sólo pendiente del otro, lo tienes complicado”.
Orgullosa de tu cuerpo. Pero si quieres que tu GPS siga funcionando como en el primer kilómetro, tienes que confiar en ti para vivir la sexualidad con más placer. Y ahí es fundamental que te olvides de esos bloqueos que muchas veces nos generan inseguridades, como no sentirnos a gusto con nuestro cuerpo. No tener un físico perfecto no te impide desenvolverte en la cama con la misma pasión y confianza que si lo tuvieses. Te darás cuenta de que sólo alejando esos miedos aumentarán tus ganas de experimentar más placer sexual. Crea tus fantasías eróticas. “A veces, cuando las fantasías se hacen realidad dejan de ser fantasías. Hay gente con una sexualidad maravillosa que no las tiene y otras que sí las tienen y no tienen una sexualidad estupenda”, explica Francisca Molero, para la que recrearse en una fantasía no es sinónimo, en ningún caso, de querer llevarla a la práctica. Lo que sucede es que a través de ellas también podemos estar sacando fantasmas, miedos o cosas que nos han podido suceder en algún momento y que todavía palpitan en el subconsciente.
Tú eliges la cantidad. No siempre se tienen las mismas ganas de tener sexo. Existen factores psicológicos y físicos que influyen en el desarrollo de tu libido y en cómo tu cuerpo gestiona el deseo. “Aquí vuelve a ser importante el consenso”, explica Francisca Molero. “La gente cree que si tienes pareja no puedes disfrutar del sexo de forma individual, que tienes que compartirlo sí o sí, pero no a todo el mundo le apetece en el mismo momento. Yo siempre pongo un ejemplo : si un domingo estoy en casa y a media mañana me apetece comerme una manzana, ¿me enfado porque a mi pareja no le apetezca comérsela también? Pues en el sexo, ig ual.”
...Y también la calidad. Habrá momentos en los que prefieras llevar la iniciativa en la cama y ejercer la dominación sobre tu pareja. Y otros, en cambio, en los que prefieras mostrarte más sumisa. ¿Cómo se logra el equilibrio ? “No es cierto que los hombres prefieran que las mujeres lleven la voz cantante. Creo que es fundamental dejarte llevar por lo que te apetece en ese momento, no pensar en si él te juzgará o no. Aquí es muy importante el efecto sorpresa, el desarrollar la curiosidad, en la sexualidad inter viene la mente y el cuerpo y depende de cómo estemos, estaremos más o menos motivados. Por eso hay que huir de las expectativas”, afirma Moleto.
NO PUEDES DISFRUTAR DEL SEXO SI PIENSAS SIEMPRE EN EL OTRO