Glamour (Spain)

HOT TOPIC. El nuevo tabú

Hollywood ya le ha puesto nombre. Se trata del ageism o la discrimina­ción que sufren las mujeres cuando van cumpliendo años.

- Texto: Elena Mandacen

Te imaginas que en tu currículum no pudieses poner tu edad por miedo a sentirte rechazada? Pues algo similar es lo que ha pasado con la web IMDB, esa página a la que acude todo el mundo para conocer la vida personal y profesiona­l de quienes se dedican al cine.

Todo comenzó cuando el Estado de California aprobaba una ley por la que les obligaba a no publicar las edades de los artistas. Lo llamativo del caso es que, según palabras de la actriz y presidenta del gremio de actores Gabrielle Carteris (Andrea en Sensación de Vivir), se trata de una medida que les ayudará a superar la discrimina­ción por edad que sufren, sobre todo las mujeres, en Hollywood. Como era de esperar, la todopodero­sa IMDB ha recurrido esta polémica medida a la espera de que un juez decida qué hacer. Comienza la batalla legal por conocer la edad de las estrellas.

¿Los 30 son los nuevos 50?

Anne Hathaway tiene sólo 33 años y ya sabe lo que es que te discrimine­n por tu edad. “Cuando tenía 20, los personajes estaban escritos para mujeres de 50 y me los daban a mí. Ahora tengo 30 y me pregunto que por qué le dan a esa chica de 24 mi papel. Lo curioso es que yo fui esa chica de 24 años una vez y no debería estar triste por ello”, explicó durante una entrevista en Hollywood Reporter. Otra celeb que sabe de qué habla es Maggie Gyllenhaal que, a sus 38 años, reveló que había sido rechazada para interpreta­r a una mujer que tenía que seducir a un hombre de 55 años. ¿De verdad una mujer de esa edad no es ya lo suficiente­mente sexy para un hombre de casi 60? Esto nos lleva a una cruel reflexión: un mundo en el que una mujer de 38 años es demasiado mayor para seducir a un hombre de 55 no está demasiado en sus cabales. Que la edad ( y la juventud) importa también está claro cuando actrices como Jennifer Lawrence, de 27 años, es contratada para interpreta­r en el cine a mujeres de más de 30. Sólo tienes que verla en Joy, donde interpreta a un ama de casa divorciada y madre de tres hijos. ¿No hubiese sido más sencillo contratar a una actriz de 40 para este papel? Por no hablar que cuando Lawrence tenía 21 protagoniz­ó El Lado bueno de las cosas, donde se puso en la piel de una viuda cuyo marido había muerto tres años atrás. Lo chocante del caso es que su personaje en la novela original tenía 39 años.

¿Existe ageism en otras profesione­s ? Pues lamentable­mente sí. Según el último informe del Centro de Estudios de Economía Aplicada (FEDEA), las mujeres en España están mejor formadas pero cobran un 35 por ciento menos que los hombres. Y a partir de los 45 años empiezan a verse rechazadas por considerar­las “demasiado mayores”. Por no hablar de la famosa pregunta: ¿tienes pensado tener hijos?

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