Proenza Schouler abandona Nueva York y escoge París para presentar sus nuevas colecciones Miuccia Prada apuesta por una estrategia arty con su plataforma Prada365
sistema tradicional de temporadas y desfiles y reivindicar la exclusividad a través de la restricción de publicación de imágenes y vídeos a través de los canales sociales.
Es el caso de Phoebe Philo para Céline, la diseñadora británica se sitúa en las antípodas de Vetements comercialmente hablando: mientras unos hacen de internet el principal campo de actuación de su estrategia, la otra ni tan siquiera practica el e-commerce, y no ha sido hasta hace muy pocos meses cuando Philo anunciaba que, por fin, la empresa se unía a Instagram –a pesar de que la diseñadora siempre se ha mostrado reacia a sucumbir ante el poder de las redes sociales–. Su mosaico de imágenes no es más que una prolongación de la filoso - fía de la casa francesa, Céline construye su propio concepto de feminidad a través de siluetas oversize, looks austeros y trajes sas- tre de influencia masculina que desafían las propias reglas de Instagram. A pesar de que la maison haya apostado por estimular su faceta más comercial, no piensa renunciar a sus valores, por eso, la imagen que inauguró su cuenta el mes de febrero pasado no era un bolso ni un par de zapatos, sino la pata de un caballo peludito de raza británica. Durante el desfile, las modelos caminaban en todas direcciones sin sentido aparente, como una metáfora perfecta del momento de cambio que atraviesa la industria.
La pasada primavera, Miuccia Prada daba carpetazo a las campañas de publicidad
tradicionales y anunciaba su nueva estrategia : Prada365. De nuevo, La Signora le da una nueva vuelta de tuerca al sistema para crear su propio canal de comunicación: una plataforma de vocación artística que abarcará los anuncios para revistas y medios impresos, pero también otros diseñados para internet y las imágenes de Instagram.
Adiós a la Gran Manzana. Durante la celebración de la primera jornada de la Alta Costura parisina, dos nombres acaparaban la atención de editores y medios especializados. Las americanas Proenza Schouler y Rodarte abandonaban su lugar de origen para presentar sus colecciones en el marco europeo de la Costura. Es obligado preg untarse si la situación política de Estados Unidos, con Donald Trump al frente del país, ha influido en esta nueva toma de decisiones de dos etiquetas clásicas americanas. “Llevamos dos años trabajando en la idea de unificar las colecciones en dos presentaciones”, explicaban Lázaro Hernández y Jack Mccollough, “y París tiene las fechas que más se ajustan a este calendario”, aseg uran. Por su parte, las hermanas Mulleavy – que ya habían elegido la ciudad europea para presentar su colección para este invierno –, continúan practicando una propuesta que se mueve a medio camino entre el Ready to Wear y la Costura al frente de Rodarte. Un nuevo paradigma que remueve los cimientos de un sistema que se resquebraja . Y es que ya se sabe, renovarse o morir... ¿O no?