No es solo moda. Sara Sáez
El Museo Metropolitano de Nueva York se prepara para la alfombra roja más excéntrica de las últimas ediciones. El imaginario camp recupera el artificio y el exceso... y lo celebra.
a palabra camp proviene del término francés se camper – cuyo significado sería algo así como posar de una manera exagerada–, mientras que en Reino Unido suelen emplear el adjetivo campy o cheesy para referirse a objetos y eventos populares que adquieren las características de la estética camp. El 2019 recupera el concepto en todo su esplendor a través de la que promete convertirse en una de las pasarelas más excéntricas de los últimos tiempos y que tendrá lugar durante la celebración de la próxima gala del MET. Bajo el título Camp: Notes on Fashion, la exposición recogerá en Nueva York los diseños más irónicos, excesivos y artificiosos de los últimos tiempos. Desde los abrigos fabricados con ositos de peluche diseñados por Jean- Charles de Castelbajac a finales de la década de los 80, hasta algunas de las creaciones más recientes de Marc Jacobs o Moschino. Pero también es camp Richard Quinn y su propuesta de no-identidad, la fantasía onírica de Thom Browne, Vetements con sus mensajes cargados de ironía; y Alessandro Michele con sus voluptuosas colecciones para Gucci. No en vano, el italiano ejercerá de anfitrión de la gala, junto a Lady Gaga, Harry Styles, Serena Williams y Anna Wintour. "Suele haber malentendidos sobre el significado real de esta palabra", explicaba el diseñador a The New York Times. "Camp realmente significa la capacidad única de combinar el arte