EL ‘ABECÉ’ DE LA HIDRATACIÓN
“Los labios carecen de glándulas sebáceas y no producen vitamina E –que se encuentra de forma natural en el sebo–, por eso es complicado protegerlos de las agresiones externas como el frío y el viento”, explica Pedro Catalá de Twelve Beauty. “La vaselina o el aceite mineral que contienen algunos productos no se adhieren en los labios; de ahí que haya que aplicarlos una y otra vez.” El experto aconseja apostar por ingredientes como Raíz de konjac: un acondicionador natural. Manteca orgánica de cupuaçú: repleta de antioxidantes, aporta confort. Tocoferol: vitamina que mejora la función barrera de la piel. Aceite orgánico de girasol: suaviza y fortalece los labios sensibles.