¿POR QUÉ LLAMAMOS 'BOMBERS' A PRENDAS QUE NO LO SON?
De permanecer ocultas en el armario de un puñado de nostálgicos, a figurar en la primera línea de las tendencias actuales. De repente, todas las prendas de semiabrigo con una goma en la cintura y en los puños han pasado a llamarse bombers, algo que ha originado un auténtico caos nominal. Y eso es como confundir la panga con la merluza. Las bombers (en español, cazabombarderos) son cazadoras de origen militar que nacieron en EE UU a mediados del siglo pasado. El modelo más célebre es el MA-1 (a la derecha), que hoy lo fabrica Alpha Industries, una de las firmas favoritas de Kanye West. Todo lo demás es otra cosa: beisboleras, harringtons, cortavientos, souvenir jackets… Ante la duda, usa siempre el genérico: cazadora. ¿ES UNA BUENA IDEA COMPRAR CAMISAS CON BOLSILLOS DE PLASTRÓN? Todo depende de tu manía por almacenar porquerías en los bolsillos. Los patch pockets o de plastrón, tipo parche y cosidos en el exterior de la prenda, son meros elementos decorativos: no están ahí para que almacenes la cartera, un bolígrafo o el casco de la moto. El empresario Gianni Agnelli siempre llevaba bolsillos en sus camisas de verano, pero vacíos. Si estás dispuesto a seguir su ejemplo, en ese caso podría ser una buena idea. No es que sea difícil, es que es rotundamente imposible que las encuentres en una tienda. Porque es ilegal y porque además puedes ir al infierno por ser una mala persona. El caparazón de la tortuga carey, un animal marino en peligro de extinción, es tan suculento como los colmillos de los elefantes. Y esa circunstancia ha motivado que la especie esté seriamente amenazada. Por eso, su captura y comercio están perseguidos por el Convenio sobre el Comercio Internacional de Especies de Fauna y Flora Salvaje Amenazadas, suscrito por 175 países. Cuando hoy se habla de una montura de carey se sobrentiende que se trata de acetato, un material más barato e igual de bonito. Todo sea por dejar en paz a los animalitos.