EL 'PERFECT SERVE' Con pepino
El elixir de la felicidad llega desde el Viejo Mundo en una botella hexagonal. No se vende en ninguna santería, ni es cosa de magia. Alquimistas de los lugares más recónditos lo intentaron, pero solo Hendrick's Gin será quien ponga en las manos de los mejores bartenders este sofisticado líquido. ¿Su nombre? Quinetum. ¿Y su peculiaridad? Ser el potenciador más exclusivo e innovador del sabor de tus gin-tonics. Está inspirado en la fórmula que el químico Thomas Wiffen enunciara en el siglo xix. Su base es la quinina, compuesto orgánico de la planta de la quina que antiguamente se utilizaba como tratamiento contra la malaria. Como en cualquiera de los grandes placeres, la perfección radica en su justa medida, esa que le confiere un delicioso amargor a la tónica. Leslie Gracey, la Master Destiller de la marca, reformula la receta prima y combina dicha sustancia con extractos botánicos y destilados, como el cardo, la naranja o la lavanda.
CLAVES DEL NUEVO RITUAL DE HENDRICK’S GIN La fiebre por el gin-tonic se mantiene especialmente viva en España. Y eso que hubo picos en los que la tendencia trajo consigo fusiones desorbitadas y absurdas, como mezclar todo con todo hasta el punto de poder tomar tu copa con tenedor; como si de una ensalada se tratase. Hendrik's Gin apuesta hoy por volver a los orígenes y recuperar la esencia de la ginebra con tónica. "Hay que evitar recargar con detalles innecesarios", afirma Borja Monjero, Brand Ambasador español de la firma. "Menos es más y con solo tres ingredientes (Hendrick's Gin, Quitetum y un botellín de tónica) es posible encontrar el equilibrio del combinado perfecto". INGREDIENTES: ·5cl de Hendrick's · 0,5 cl de Quinetum ·20cl de tónica (aproximadamente) · 4 piezas de hielo grandes (que no haya flotación) · Carpaccio de pepino (para decorar).