17 años de prosperidad
CUANDO LOS CIUDADANOS se preguntan qué hacían antes todos estos economistas que ahora han proliferado explicando la crisis a posteriori, muchos expertos alegan en su defensa que ellos sí vieron venir el apocalipsis financiero y que fueron los políticos los que no hicieron nada para evitarlo. Sin ánimo de hacer una lista sobre quién miente y quién no, uno de estos expertos, Juan Ignacio Crespo, sí dejó bastantes artículos y algún libro que atestiguaban que él adelantó cosas que se nos venían encima. Este matemático, estadístico y analista financiero se dedica a estudiar innumerables gráficos y tablas (en el argot, chartismo, del inglés chart), para llegar a conclusiones a partir de fenómenos que se repiten una y otra vez y que permiten vaticinar qué puede venir después. De hecho, Crespo recuerda que a lo largo de la historia de los datos económicos sí existen patrones que se repiten y que antes de las recesiones hay fenómenos que tarde o temprano coinciden. De estas circunstancias, según el matemático, unas son necesarias pero insuficientes y otras son suficientes pero no necesarias.
De esta hipótesis extraemos dos noticias, una buena y una mala. Empecemos por la mala: entre este año y el que viene habrá una nueva recesión mundial. Mirando el comportamiento de varios factores (caída de los precios de las materias primas, reducción de beneficios empresariales no financieros, situación de tipos de cambio…) estaríamos a punto de entrar en crisis global. Todos estos factores se han repetido en escenarios similares en años anteriores. Lo que no sabemos es exactamente cuándo ocurrirá ni la gravedad de los acontecimientos. La buena noticia es que el chartismo augura que a partir de 2018 comenzará una época de prosperidad que durará 17 años. Mejor nos quedamos con eso.
En el año 2000, Fernando Encinar fundóidealistaconsuhermanojesúsy con su colega César Oteiza. Hoy, tras habersuperadodoscrisis–lainmobiliariayla del puntocom–,esteproyectosehaconvertido en el mayor escaparate de pisos y casas en venta o alquiler del país y da trabajo a más de 400 personas (además de ayudar a otras muchas más a encontrar su hogar soñado). Que no te engañen: marca España es esto.
GQ: ¿Por qué Idealista es punta de lanza del sector inmobiliario? FERNANDO ENCINAR: El secreto es que cada una de las personas que trabaja aquí golpea con su martillo en el mismo clavo. Desde que comenzamos hace 16 años hemos tenido muy claro a quién nos íbamos a dirigir de manera exclusiva: a todas aquellas personas que buscan una casa para comprar o alquilar. Ni más ni menos. Sabemos que en este entorno hay que tomar un montón de pequeñas decisiones y nosotros lo que hacemos es simplificar la toma de estas decisiones. Nuestras web y app son sencillas e intuitivas, y esto lo hemos conseguido sacrificando ingresos. Por ejemplo, hace unos años optamos por eliminar la publicidad de nuestra página de inicio, lo que nos proporcionaba unos 600.000 euros al año, porque ralentizaba y hacía más molesta la navegación. Cortamos esa línea de ingresos porque sabíamos que haciendo un producto más accesible terminaríamos ganándola por algún otro sitio. En definitiva, la clave es haber sabido simplificar multitud de detalles para que el usuario se sienta más cómodo a la hora de buscar un hogar. GQ: La crisis inmobiliaria no parece haber afectado (mucho) a la compañía… ¿Cómo habéis sorteado los obstáculos? F. E.: Gracias al equipo. Suena evidente pero es así. Idealista.com comenzó siendo
Nos colamos en la casa (y en la terraza) de Fernando Encinar gracias a Med Rooftops by Gin Mare, iniciativa que nos acerca al espíritu mediterráneo de esta ginebra a través del concepto
Más información en
sharing. terrace medrooftops.com.