Jeff Guyton, CEO de Mazda en Europa.
Nuestra cita con Jeff Guyton se produce en el marco del Salón del Automóvil de Tokio. El Presidente de Mazda Motor Europe se muestra exultante después de la triunfal presentación del Vision Coupé, un concept que apunta la línea de diseño que seguirá la marca para la próxima generación de modelos, y del Kai Concept, con el nuevo motor de gasolina Skyactiv-x. Todas estas novedades evidencian que Mazda tiene el futuro bien encarrilado, aunque cuando Guyton tomó posesión de su cargo no todo el horizonte estaba tan despejado. "Acabábamos de pasar el proceso de Lehman Brothers y faltaban dos años para el terremoto y el tsunami en Japón", rememora, "las circunstancias eran difíciles y se iban a complicar todavía más. Después del terremoto y de la crisis económica en Europa, la situación empezó a despejarse lentamente. Volvimos a apostar por el diseño y renovamos la red de concesionarios en casi todos los países. Ahora cumplimos el quinto año de crecimiento y, si comparo este momento con hace siete años, el nivel total de ventas de coches en Europa es un 7% más alto. Así que el diseño, la tecnología y la capacidad de reacción de nuestra red nos ha permitido un mayor desarrollo".
El proceso de implantar en Europa una compañía tan marcadamente oriental no iba a resultar tarea fácil. "Hemos trabajado mucho para lograr que nuestros vendedores y empleados entiendan la filosofía y la cultura de esta compañía", reconoce Guyton. "El espíritu se traduce en una actitud: no rendirse nunca, y ese espíritu se aprecia en nuestra tecnología, pero también en cómo nos dirigimos al mercado europeo. Seremos pequeños, pero podemos hacer cosas grandes".
Existen rasgos de Mazda que el cliente europeo valora y otros que le resultan más difíciles de entender. "El diseño gusta universalmente y la gente compra nuestros coches porque ofrecemos vehículos de calidad a un precio razonable", explica, "pero creo que la gente no sabe exacta-
mente lo que es la tecnología Skyactiv. Nuestros equipos en cada país se esfuerzan por explicarlo: diésel con economía híbrida, gasolina con economía diésel… Este tipo de cosas son muy simples de decir, pero la gente no las entiende. También creo que en Japón el consumidor es más consciente del esfuerzo que requiere desarrollar una tecnología, valora más el sacrificio que hay detrás. Skyactiv-x es una sensación allí porque se reconoce que los ingenieros han creado algo original, nuevo y diferente. En Europa no se valora realmente todo el proceso".
MERCADO EUROPEO
Eso sí, el mercado europeo significa para Mazda un importante porcentaje de las ventas, como puntualiza Jeff Guyton: "Europa representa en torno al 12-15% del negocio global de Mazda, pero es interesante, porque vendemos más coches en Europa que en Japón, China o Australia".
Las preferencias de consumo en el Viejo Continente están claramente definidas, tal y como razona Guyton: "Ahora mismo, CX5 y CX3 lideran las ventas europeas. El CX5, para mí, es un héroe. El crecimiento del CX3 ha sido sorprendente en un corto espacio de tiempo, pero el CX5 es el estandarte que hemos tenido durante mucho tiempo y cada año vendemos más. Probablemente, el Mazda 2 es el menos conocido, porque pertenece a un segmento de precios bajos. Necesitamos maximizar el modelo y situarlo en un puesto más premium. Cuando ves un Mazda 2 por la calle piensas que quien lo conduce ha pagado una buena suma de dinero para tener un coche bien equipado. No es un coche pequeño, barato y horrible".
Afable y cercano, Guyton adopta un tono aún más distendido cuando se le pregunta por sus preferencias al volante para disfrutar conduciendo: "Amo el MX5, pero estoy muy sorprendido de cuánto me gusta el nuevo CX5, tengo el diésel automático, debido a mi trabajo conduzco mucho por autopista y ese coche para mí resulta perfecto para largas distancias. Sorprende por lo auténtico que es".
Enseguida recupera cierta solemnidad para abordar el Dieselgate, que azotó a la industria automovilística europea en 2015. "Desafortunadamente, se ha denominado Dieselgate" en lugar de Volkswagengate… La pena es que se utilice la palabra diésel, porque no es un tema de tecnología sino de comportamiento ético. Resulta triste, porque la tecnología es fundamentalmente buena o puede serlo. Ésa es la cuestión".
No esquiva tampoco el conflicto catalán y muestra su preocupación por sus consecuencias para el negocio automovilístico: "Nuestra compañía tiene una importante operación portuaria en Cataluña y es muy importante para nosotros. Queremos continuar haciendo negocio con ese puerto de Barcelona, que es estratégico en Europa. Nos sentimos muy preocupados, pero a la vez esperanzados en que la situación se estabilizará pronto. No tengo una opinión sobre lo que debe ocurrir, aunque espero que el conflicto se resuelva pacíficamente lo antes posible".
Terminamos la conversación convencidos de que al Director Ejecutivo y Presidente de Mazda Europa, le entusiasma hablar de coches y es un apasionado de su trabajo. En un mundo lleno de ejecutivos grises, no es cualquier cosa.