MANUFACTURA
Desde su inauguración en 2014, la manufactura de Panerai en Neuchâtel (Suiza) ha propiciado una revolución en el mundo de las complicaciones y de los nuevos materiales en la alta relojería.
Panerai y la fábrica de sueños relojeros.
Cuando Officine Panerai centralizó su producción2 en 2014 en su modernísima manufactura de 10.000 m Neuchâtel, buscaba algo más que aumentar las ventas de sus modelos más icónicos, como los Luminor y los Radiomir. Ansiaba, también, dar un salto de calidad para consolidarse en el Olimpo de la alta relojería a través de su departamento de I+D, el que desarrolla los nuevos materiales y las grandes complicaciones. Cuatro años después se puede confirmar que lo ha conseguido gracias a cuatro espectaculares modelos que han asombrado al mundo relojero: primero presentó en 2016 el Radiomir 1940 Minute Repeater, un repetidor de minutos doble (para un segundo huso horario) que además integra el primer movimiento tourbillon de la manufactura. Luego en 2017 llegó el LAB-ID, un Luminor con una caja fabricada en Carbotech, un material que introdujo Panerai en la industria y que ofrece propiedades superiores a la cerámica o el titanio. Y este año ha rizado el rizo lanzando dos modelos rompedores: L'astronomo, un homenaje a Galileo con GMT, tourbillon y fases de luna; y Lo Scienzato, otro tourbillon doble huso con la caja realizada en titanio mediante un método de impresión 3D, toda una revolución para la relojería de lujo.