ÉSTAS Y OTRAS REALIDADES
"¿Cómo debe ser una revista masculina hoy en día?"… La pregunta llegó a mí por correo electrónico y el primer adjetivo que se me vino a la cabeza fue éste: representativa.
___Recuerdo tener entre mis manos mi primera revista "masculina" en casa de mi tío. Era una revista de coches. La ojeé creyendo que me estaba colando en un club de caballeros, como cuando Leonardo Dicaprio entra en el restaurante de primera clase del Titanic vestido como un pingüino. El error de abordaje fue mío: asumí que esa revista con carrocerías por doquier iba dirigida sólo a ellos. A mí me esperaba en casa mi revista adolescente con olor a pintauñas y manuales de '¡SMS para volverle loco!', o los diez trucos para saber si le gustaba al chico que se sentaba al final del autobús. Así nos lo enseñaban.
___Realmente, las revistas masculinas y femeninas han tenido siempre la misma esencia. Ambas han representado a seres arquetípicos, ideales inalcanzables de más de metro ochenta. En el caso de las revistas masculinas, el 'Hombre Real' ha sido un señor con poder físico y político, varonil, alejado de la domesticidad, la sensibilidad, o la vulnerabilidad. Un suerte de James Bond con camisa planchada y cartera de cuero.
___Por fortuna, en este 2018 la masculinidad y la feminidad no son adjetivos únicos como el anillo de la Tierra Media. Así que una revista masculina de hoy en día debe representar todas las nuevas realidades que están ahí, en tu casa y en la de enfrente. Por ejemplo, puede percibir el feminismo como una amenaza o puede percibirlo como una oportunidad. No se trata de subirse a la ola por moda, sino porque arrastra todos los convencionalismos y oquedades del pasado. Y esto es liberador para nosotras pero, sin duda, también lo es para vosotros.