HONOR Y SANGRE SOBRE LA BIBLIA PATRIARCAL
En una de las secuencias más memorables de Tienes un e-mail (1998), Tom Hanks le explica a Meg Ryan que El padrino "es el I Ching, la fuente de todo conocimiento, la respuesta a todas las preguntas". En realidad, a lo que la guionista y directora Nora Ephron se refería con este monólogo es a que la película, primer evento cinematográfico de los 70 y responsable de muchas cinefilias entre miembros de la Generación X, es la fuente de todo conocimiento masculino. Así, esta quintaesencial fábula sobre padres terribles e hijos consumidos por un legado tóxico maneja una serie de conceptos (el honor, el fatalismo, la autoridad patriarcal, la pasta
al dente) que aparecen siempre supeditados a esa tesis que Martin Scorsese desarrollaría después en Uno de los nuestros (1990): la identificación con el hombre-bestia, el antihéroe, el lado oscuro de la psique masculina. ___Cuando la actriz Morgana King falleció el pasado agosto, la mayor parte de los medios la describió como "la matriarca de los Corleone", obviando que el personaje no tiene una sola línea de diálogo memorable. Es un ejemplo perfecto del rol que las mujeres asumen en El padrino: testigos silenciosos, víctimas o motores de la tragedia. Nunca agentes. La carrera de King estuvo llena de logros, pero sólo la recordamos por su papel secundario en la biblia patriarcal.