De Carlitos a don Ricardo

Le hemos visto hacerse un hombre (GQ) en nuestra sala de estar gracias a 'Cuéntame', pero toda aventura catódica tiene un fin. Hoy RICARDO GÓMEZ nos cuenta cómo cerrar una puerta le ha permitido abrir mil ventanas.

Ya conoces el titular: 'Ricardo Gómez deja Cuéntame cómo pasó'. Tras 17 años, Carlitos había crecido tanto que el nido de los Alcántara se le había quedado pequeño. Fue una decisión muy meditada, fruto de un sentir que llevaba tiempo echando raíces en su interior: "Me voy tranquilo. Cuando tu cabeza te dice que ha llegado la hora, lo mejor es no llevarle la contraria. Hay que saber cuándo arriesgar; y ahora me toca salir a jugar al mundo real", nos cuenta Ricardo.

Este madrileño nacido en 1994 simboliza una idea algo inquietante: el paso del tiempo. Se coló en casa por primera vez con apenas siete añitos, en 2001. Le hemos visto crecer y él nos ha visto envejecer. El set de rodaje ha sido su escuela, la mejor posible: "Cuéntame me acompaña en cada nuevo proyecto, pero no lo veo como algo negativo. De todas formas, en los últimos años he diversificado mi carrera para no encasillarme", explica, en velada referencia a la nominación al Goya en la categoría de Mejor actor revelación que obtuvo en 2016 por su trabajo en 1898: Los últimos de Filipinas.

Protagonista de facto del serial de TVE (la voz en off del Carlos adulto marca el ritmo de la narración), Ricardo Gómez es pieza clave de nuestra educación catódica. Y la fama también arroja sombras. En tiempos de poscensura, una figura mediática debe medir bien lo que dice. Ricardo es impulsivo, pero también listo, por eso se mueve con el freno de mano a medio echar: "Hasta hace dos años, yo tuiteaba todo lo que se me pasaba por la cabeza. Ahora tengo que cuidar lo que digo porque no me gusta encontrarme con un portal de noticias diciendo que Ricardo la ha liado en redes por opinar no sé qué. Uno aprende a distanciarse de los haters, pero a nadie le gusta coger el móvil y leer insultos".

El mundo real al que hace referencia Ricardo unas líneas atrás ya va cogiendo forma. Encadena tres proyectos de distinta envergadura. Por un lado, acaba de estrenar en Telecinco Vivir sin permiso, una ambiciosa serie en la que comparte planos con José Coronado y Leonor Watling. Por otro, del 29 de noviembre al 30 de diciembre le tendremos en el Teatro Español con Rojo, obra basada en un texto de John Logan (galardonada con seis premios Tony) que ha sacado adelante junto a su amigo Juan Echanove. Y, por último, el año que viene rodará su primer papel protagonista en el cine a las órdenes de Óscar Aibar, director con el que ya ha trabajado anteriormente en Cuéntame.

Televisión, teatro y cine para un actor que no se pone límites: "No cambia nada, pero ha cambiado todo".