ANNA CASTILLO
PONGAMOS QUE HABLO DE 'ARDE MADRID'
Ava Gardner y el faranduleo de la capital se citan en la nueva serie de producción propia de Movistar+, una comedia en la que Anna da vida a una joven que trata de saciar su sed en pleno erial ideológico franquista.
Cuando nos citamos con una actriz en nuestras oficinas de Madrid, lo habitual es que un miembro de su séquito avise de su llegada con tiempo para que alguien de nuestro equipo la reciba en recepción. Anna Castillo (Barcelona, 1993), sin embargo, se salta todo protocolo e irrumpe en la redacción de GQ, un lugar por lo general bastante tranquilo. "Hola, ¿qué tal? Venía a lo de las fotos", anuncia por sorpresa. "Claro, adelante. Estás en tu casa…". Sirva esta anécdota como contexto, como una nota al margen que habla sobre la personalidad de una de las actrices con más proyección de nuestro cine. Anna Castillo es espontánea y natural; nada diva. También es alegre y tiene un peculiar poder de atracción, cualidad que se aprecia a través de la pantalla y más si cabe en persona.
Llega al encuentro, eso sí, algo agotada. Acaba de regresar del Festival de San Sebastián, a donde ha viajado para presentar Viaje al cuarto de una madre, película –ópera prima de Celia Rico– que se ha llevado el Premio de la Juventud de Zinemaldia por su acertadísima reflexión sobre las relaciones materno-filiales. "Es un ejemplo de la riqueza del nuevo cine español. Es evidente que hay una generación de artistas jóvenes que tienen ganas de hacer algo distinto. Ahora mismo se rueda cine íntimo, indie, de gran presupuesto… Ficción de calidad, en definitiva. Estamos en un momento muy bueno y yo me siento especialmente orgullosa de formar parte de todo esto", nos cuenta mientras se acomoda y hojea un ejemplar de GQ.
Anna disfruta de un otoño dulce. Además de la puesta de largo de Viaje… (el pasado 5 de octubre), la barcelonesa se deja ver cada semana en la parrilla de TVE con Estoy vivo, en antena desde finales de septiembre hasta no se sabe bien cuándo. "Creo que es muy difícil hacer una serie en abierto porque siempre te acompaña una sensación de incertidumbre, de no saber si funciona lo suficiente como para seguir adelante. En una película trabajas con un arco de transformación de personaje cerrado mientras que en una producción semanal que se emite en abierto te enfrentas a un guión sin saber cómo serán los siguientes". con ella para rodajes de calado, tiene prestigio en el sector. Días de vino y rosas que vienen precedidos de un Goya a la Mejor actriz revelación por su trabajo en El olivo (Icíar Bollaín, 2016): "Un premio así te da mucha visibilidad en un momento dado. Es como un aval de confianza, pero lo cierto es que después tienes que seguir currando y pasando pruebas. De hecho, a mí Arde Madrid me lo propuso Paco en la cena de nominados al Goya de aquella edición [la 31ª, celebrada en febrero de 2017]. Todavía no había ganado, pero se acercó y me dijo: 'Quiero hablar contigo".
Entre aquellos días y éstos se coló la adaptación al cine de La llamada (Javier Ambrossi y Javier Calvo, 2017), un fenómeno que "volvió locas a las niñas": "En el momento no te das cuenta de lo que supone porque vas paso a paso: primero la obrita en el hall del Teatro Lara, luego la sala grande, después la renovación para otra temporada… y acabas haciendo una película preciosa. Aquello me cambió la vida a nivel personal y profesional, sobre todo porque trabajé con mis amigos, con mi familia. Fueron cinco años de dedicación, de pequeñas recompensas".
Esas "niñas" a las que hace referencia no son sólo niñas. También son chicas y chicos jóvenes y personas en edad adulta: Anna goza de una presencia pública enorme, aunque a ella la exposición mediática no le interesa en exceso. Tiene cerca de 270.000 seguidores en Instagram, lo cual es una barbaridad: "Ay, no soy muy consciente de eso. Las RR SS las veo igual ahora que cuando tenía pocos seguidores. No me gusta usarlas con fines profesionales. Sigo colgando lo que me da la gana. Si acaso intento no subir fotos en las que salgo pedo. Eso sí, si estoy de fiesta y hago una Stories… Amigo, es lo que hay. Para algo estoy de fiesta, ¿no?".
Pues sí. Y que siga, por favor. Que nadie te diga, como querían hacer con tu Pilar, cómo vivir la vida.