CHINO DARÍN
/ El hijo de Ricardo Darín ha cogido tal velocidad que ya no admite comparación. Este talento vuela solo.
Tratándose de Chino Darín (de nombre Ricardo Mario, nacido en Argentina en 1989), lo fácil es arrancar el texto hablando de su padre. O centrarlo en la relación que mantienen entre ambos. O comparar la carrera de uno y otro. Pero en GQ no nos gusta tirar por el camino corto. Tampoco creemos en el nepotismo ni en los enchufes. Nosotros siempre hemos apostado por la meritocracia, la verdad. Y Chino está hoy en estas cuatro páginas porque se lo ha ganado. No hay más. Nos entusiasma el trabajo de Ricardo Darín (a quién no), pero Chino vuela solo. Y vuela alto, muy alto. Cada vez más. Chino es un joven actor con una proyección incuestionable que ha firmado un 2018 redondo. Por este motivo, amigo lector, hemos tomado una determinación: en lo que resta, no habrá referencias a Ricardo ni usaremos coletillas de ningún tipo. Aclarado esto, colocamos de nuevo el foco en dirección a Chino y echamos la vista atrás para explicar qué es lo que le trae por aquí. No tenemos que irnos muy lejos. A decir verdad, nos basta con centrarnos en el último mes y pico, la etapa más fértil –a nivel de estrenos– en la desbocada carrera del argentino.
Vayamos por orden. Primero, el 31 de octubre colocó en cartelera El ángel, un espídico thriller basado en hechos reales en el que da vida al partner in crime de Carlitos El ángel de la muerte Robledo, uno de los mayores psicópatas que ha conocido su país natal. La cinta, a falta de cerrar la cuenta de resultados, ha sido la película argentina más taquillera del año, lo cual da muestra de la liga en la que juega Chino en la tierra que lo vio nacer.
En segundo lugar, el 23 de noviembre Chino regresó a la cartelera con La noche de 12 años, un drama inspirado en los momentos más oscuros de la vida del expresidente uruguayo Pepe Mújica (años 70 en Sudamérica; etapa de dictaduras, tiempos de injusticias, represión y odio). Ambas cintas –la una representando a Argentina; la otra, a Uruguay– forman parte del listado de 87 títulos candidatos al Oscar a la Mejor película extranjera para la 91ª edición de la entrega de los galardones que más brillan en la industria. Aunque todavía deben pasar la criba final (hasta el 22 de enero no se conocerá a los nominados), su participación en dos películas listadas garantiza el buen tino del chaval a la hora de elegir proyectos. También el buen criterio de los directores de casting con los que se ha ido topando, que son al fin y al cabo los que han decidido darle papeles de peso en sus proyectos. "Estoy tratando de disfrutar lo máximo que puedo de un año tan ajetreado. Me han pasado muchas cosas lindas concentradas en apenas unos meses y siento
"(…), el hijo de Ricardo Darín". Olvídate de la coletilla: la carrera de Chino ha cogido tal velocidad que ya no admite comparación. Vuela solo, como demuestra en los estrenos con los que cierra el año.