Tomar la delantera
Comerse el segmento de los compactos premium es el objetivo del primer SERIE 1 de tracción delantera.
Hace algunos años (pongamos… cinco, por ejemplo), el mero hecho de que el Serie 1 se fuera a pasar a la tracción delantera habría acaparado unos cuantos titulares y habría indignado a no pocos puristas de la marca. Hoy, es casi una nota a pie de página en el relato de un modelo que se renueva por completo y pega un salto cualitativo importante para luchar de igual a igual con la cada vez más dura competencia entre los compactos premium.
Qué duda cabe, tiene sentido ahorrar en costes y en piezas en algo tan prescindible para la mayoría de conductores si, de ese modo, se puede poner el acento en la tecnología o, cómo no, en el espacio interior (y este nuevo Serie 1 gana mucho, sobre todo en las plazas traseras; en la misma línea del ahorro, sólo habrá versión de cinco puertas).
Del dinamismo, como ya viene ocurriendo en otros BMW de tracción delantera, no hay que preocuparse. Al volante, a menos que seas un piloto experto, apenas notarás la diferencia. La nueva arquitectura del eje delantero de la marca bávara permite ejecutar una fina conducción deportiva y las dos versiones más potentes (el M135i xdrive y el 120d) tienen tracción a las cuatro ruedas de serie. Dos sistemas actúan de forma coordinada para evitar el subviraje y permitir hacer los giros con precisión: el ARB (Actuator Contiguous Wheel Slip Limitation) y el BMW Performance Control (distribución del momento de guiñada). No obstante, el conductor puede regular la acción del DSC para permitir un mayor deslizamiento.
EQUIPAMIENTO
La oferta de motores consiste en tres diésel 116d (116 CV), 118d (150 CV) y 120d (190 CV); y dos gasolina: 118i (140 CV) y el ya citado M135i xdrive (306 CV). Asociados, por primera vez, a tres tipos de transmisión: manual de seis velocidades y Steptronic de doble embrague de siete y ocho relaciones.
En el capítulo de seguridad, el Serie 1 hereda numerosos sistemas de sus hermanos mayores. De serie, el aviso de colisión con reconocimiento de peatones y frenada de emergencia y el lane assist activo. Como opción, el control de crucero con función de frenado y Driving Assistant (con asistencia de cambio de carril), el aviso de colisión trasera y el aviso de tráfico cruzado posterior. Del mismo modo, incorpora el novedoso asistente de marcha atrás que permite copiar en reversa los últimos 50 metros que se hicieron con el coche marcha adelante. Debuta asimismo en el Serie 1 el head-up display.
También, cómo no, introduce un mayordomo virtual que entiende el lenguaje natural y que aprende de los hábitos y rutinas del conductor para adaptarse a sus gustos (como novedad, el conductor puede darle un nombre alternativo a BMW para dirigirse a él). Otro elemento interesante es la apertura del coche por medio del móvil (con tecnología NFC; el smartphone, una vez en la bandeja adaptada para colocarlo, también sirve como llave para el encendido del vehículo). En resumen, el Serie 1 crece en espacio y es más coche que nunca. Y lo puedes tener desde 29.150 euros.