Aromas de Gibraltar
Iniciamos el año con una noticia difundida con extremado optimismo por los medios de comunicación: nuestro Gobierno progresista ha conseguido un preacuerdo sobre Gibraltar que a todos conviene y satisface, porque con él desaparecerá la Verja y se facilitarán los desplazamientos de los “cerca de 14.000 españoles” que dicen que trabajan allí. Y para demostrar la felicidad de éstos, nos exhiben algunos de sus testimonios e incluso el de un empresario –con intereses lucrativos en la Roca– que andaba acongojado antes del preacuerdo, porque sus camiones llevaban unos días parados y sin poder realizar su negocio. ¿Su negocio? Recoger la basura que genera Gibraltar para traerla y vaciarla fuera de allí. Un gráfico ejemplo del aroma que esparce entre nosotros una colonia paraíso fiscal que ha crecido a base de variados chanchullos y negocietes exentos de tributación.
También dijeron las noticias, pero más bajito, que procedente de Gibraltar nos han colado una nueva cepa del Covid mucho más contagiosa. Ante esta última muestra de generosidad, sólo cabe besarles agradecidos la mano a esos señoritos dueños de medio Sotogrande, cuyo interés, sin duda, es la creación de más empleo en el ámbito de los negocios funerarios españoles. Un interés, por cierto, muy afín con el de nuestro ef icaz Gobier no de progreso. Miguel Ángel Loma
Matar al mensajero: Nacho Cano
Ni la gripe española de 1918 ni la Guerra Civil impidieron la celebración del nuevo año en la Puerta del Sol, pero esta vez no pudo ser. El alcalde madrileño tuvo el acierto de gestionar la desinteresada actuación allí de Nacho Cano, antiguo miembro de Mecano, para brindarnos la popular canción Un año más, como homenaje a los fallecidos por el Covid, con una puesta en escena repleta de esperanzadores símbolos, como el crucifijo del artista, donado por un sacerdote que atendió a muchos que nos esperan en el Cielo. La censura impuesta a esta breve interpretación musical en T VE-1 y en otros medios de comunicación paniaguados viene a ser el enésimo gesto del Gobierno socialcomunista de eliminar cualquier atisbo de libertad, de la cual era mensajero Nacho Cano en esta ocasión. Apostemos por un 2021 feliz, y, por tanto, libre. Rocío de los Reyes Machuca