Lagarde afirma que Europa tiene “músculos increíbles” pero debe ejercitarlos
● La presidenta del Banco Central Europeo aboga en Davos por compras conjuntas de energía y de 'comodities' en la UE
La guerra de Ucrania ha demostrado que Europa tiene unos “músculos increíbles” para jugar en el mundo, y actuar como árbitro, pero debe “flexionarlos” y corregir vulnerabilidades, ya que a veces actúa contra su propio equipo, según la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde.
En un encuentro sobre la unidad de Europa en un mundo “desordenado”, en el que intervino ayer miércoles junto a otros líderes del continente en el Foro Económico Mundial de Davos (Suiza), Lagarde reconoció que hasta ahora Europa no entendía la fuerza que tenía como colectivo y que incluso, ella se había planteado alguna vez si se estaba llegando al ocaso.
Sin embargo, sacó la conclusión de que la UE no sólo no llegó al ocaso, sino que está en un “nuevo alba”, ya que hasta ahora “no entendía la fuerza que tenía como colectivo”.
Para explicarlo, usó el símil del fútbol, en el sentido de que en Europa se está creando un nuevo equipo de jugadores, que también pueden desempeñar su papel como árbitro, después de haber jugado en un campo abierto, que le hacía más vulnerable.
“Cuando los músculos están flexionados, Europa tiene una fuerza increíble, aunque de vez en cuando marcamos contra nuestro equipo”, añadió Lagarde, apuntando que esto último es lo que “ralentiza” el interés europeo y el nacional.
Se refirió a la debilidad de Europa, cuando no actúa como un conjunto, momentos en los que le afectan más los cuellos de botella que se generan, por ejemplo, en las cadenas de suministro. Otra de sus vulnerabilidades es la de depender energéticamente de países que “pueden ser extremadamente agresivos”.
A su juicio, hay que superar estas vulnerabilidades a las que hasta ahora no se les había prestado “suficiente atención”.
Volviendo al símil del deporte, igual que cuando una parte del cuerpo no funciona, te ocupas de ella, con Europa ocurre lo mismo.
En este contexto, abogó por adoptar medidas de competencia,
Con la incorporación de Bulgaria y Croacia, el euro será la segunda moneda internacional
en el comercio y en política monetaria. Sobre esto último, recordó que “pronto” serán 21 países los que asuman la misma moneda, el euro, una vez que se sumen Croacia y Bulgaria.
Con estas incorporaciones se creará la segunda moneda internacional, después del dólar.
“Ahora, hay muchas áreas en las que no estamos haciendo un trabajo tan bueno como deberíamos”, declaró la presidenta.
Preguntada por si prevé una recesión en Europa, pasó de puntillas por este asunto porque no quiere “dar titulares”, pero sí ha apuntado que se trata del “mercado más grande del mundo, el mayor comprador del mundo y esto tiene que aprovecharlo”.