La “vergüenza” por la falta de acuerdo sobre la violencia de género marca el Pleno
Reivindican la labor de las mujeres feministas en su lucha por sus derechos
Ayer, el Pleno del Ayuntamiento de Granada tenía una significación especial. Es 25-N, Día contra la Violencia de Género, y entre lazos blancos en las solapas en repulsa a la violencia machista y un acto oficial en la Plaza del Carmen con lectura de manifiesto y ofrenda floral en reconocimiento a todas las víctimas, era el día de significarse y mostrar una condena unánime a esta lacra social.
Pero no ha podido ser por cuarto año consecutivo. Desde que está Vox en el Ayuntamiento se ha roto la unidad y no pueden aprobarse declaraciones institucionales con motivo del 25-N, por lo que tuvo que quedarse en moción conjunta del resto de grupos entre el debate y las críticas en la defensa de las posiciones de cada grupo.
De “vergüenza” es como lo calificó la concejal de Igualdad, Ana Muñoz, esta situación y la falta de apoyo de Vox, que no es que se abstuviera de la moción sino que votó en contra. Muñoz, en la defensa del texto, explicó que “la violencia de género está reconocida como la violencia que nos atañe a las mujeres, que nos matan por el hecho de serlo. Es la vulneración de derechos fundamentales que afecta a la dignidad y la igualdad de las mujeres y sus hijos. Es el mayor obstáculo para alcanzar la igualdad real y una sociedad plena democrática”.
Todas las miradas estaban puestas en cómo Vox iba a defender su rechazo, su postura en contra de la moción. Lo defendió Paloma Gómez, justificar su rechazo aludiendo a la nueva Ley del sí es sí: “Hoy día hay criminales que han hecho daño que ven reducidas sus penas por la nueva ley del sí es sí. Hoy han sido tres personas y uno de ellos un violador. La ley de violencia de género fulmina la presunción de inocencia. Nuestro grupo municipal solo somos mujeres y no nos sentimos representadas en los discursos feministas. No queremos que se nos colectivice, reclamamos la igualdad de todos los españoles. No podemos aceptar el discurso de las relaciones desiguales de poder, de conf licto de la sociedad, queremos perseguir a todos los agresores o asesinos ya sean hombres o mujeres. Con las políticas nefastas del Gobierno llenan nuestras calles de inseguridad. Exigimos defender a las víctimas, a todas, mujeres, hombres, niños o mayores sin distinción”.
Esta argumentación requirió de la contestación del alcalde, Paco Cuenca, que se mostró de acuerdo en perseguir a los criminales y en la igualdad entre hombres y mujeres pero a recordado que “a las mujeres son las que matan por machismo”, por lo que recordó el contexto de la moción, que era el 25-N.
Desde Unidas Podemos, Elisa Cabrerizo fue contundente y aseguró que las violencias machistas van más allá de las parejas o exparejas y que afortunadamente ya se recoge en las estadísticas todo: pareja, sexuales, hijos, compañeros de trabajo o conocidos. “No es episódica, es estructural y continua” y lamentó también “el aumento de los discursos de odio” como el que se vivió en el Congreso hace unos días contra la ministra Irene Montero, a la que mostró su apoyo, así como a las “feministas que trajeron nuestros derechos”, rechazando tanto los discursos a nivel nacional de Vox y del PP. “Esto pasa por discursos de ese tipo, por creerse que son superiores moral y cualitativamente, lo mismo que hacía Hitler”, dijo Cabrerizo.
Por el PP, Pepa Rubia dijo que hay obligación de “rendir homenaje” a todas las mujeres asesinadas y que “la mejor manera es trabajando unidos contra esta lacra”. “Desde el PP mostramos nuestra repulsa unánime contra esta violencia y nuestro compromiso para erradicarla. Es una de las violaciones de los derechos humanos más devastadoras. Ni un solo paso atrás mientras haya una mujer asesinada”, dijo.
La concejal Ana Muñoz cerró el turno de intervenciones asegurando que “es una vergüenza que el Ayuntamiento, por tener dentro de su composición a Vox, sea incapaz de sacar una declaración contra la violencia machista” y recordó a las tres ediles de Vox que “están ahí las tres gracias a las feministas que lucharon por las mujeres, por el derecho a voto, y se lo deben aunque no se lo reconozcan, especialmente a las feministas de izquierdas. Que sean incapaces muestra a lo que han venido, que es a embarrar. 1.171 mujeres asesinadas desde 2003, ¿qué quieren más para negar la evidencia?”.
Al final votaron a favor todos los corporativos menos las tres ediles de Vox, que lo hicieron en contra.