FASE DE GRUPOS

1 1 Países Bajos Ecuador

Países Bajos: Noppert; Timber, Van Dijk, Aké; Dumfries, Koopmeiners (De Roon, 80’), De Jong, Blind; Klaassen (Berghuis, 69’), Bergwijn (Depay, 46’), Gakpo (Weghorst, 79’). Ecuador: Galíndez; Preciado, Hincapié, Torres, Porozo, Estipiñán; Caicedo, Méndez; Plata (Ibarra, 90’), Estrada (Sarmiento, 74’), Valencia (Rodríguez, 90’)

Goles: 1-0 (6’) Gapko. 1-1 (49’) Valencia.

Árbitro: Mustapha Ghorbal (argelino). Amonestó al ecuatoriano Méndez. Incidencias: Encuentro del Grupo A de la primera fase del Mundial de Qatar disputado en el estadio Khalifa de Al Rayyan ante 44.833 espectadores.

Luis Miguel Pascual (Efe)

Enner Valencia reavivó el sueño ecuatoriano de seguir adelante en el Mundial de Qatar con un gol que permitió a la Tri rescatar un empate ante Países Bajos (11), que lo deja a sólo un punto para clasificarse por segunda vez en la historia para octavos de final. El goleador se tuvo que marchar, entre lágrimas, lesionado en el tramo final del duelo, que siguió desde el banquillo con una bolsa de hielo en la rodilla derecha, aunque parece que podrá jugar el duelo decisivo ante Senegal.

Ecuador plantó cara a una de esas selecciones armadas para ganar el Mundial e incluso por momentos desarboló su juego de control, hasta que la magia del capitán obtuvo el premio buscado. De sus botas han salido los seis últimos tantos ecuatorianos en mundiales y tras los dos que marcó a Qatar en el partido inaugural consiguió otro que lo afianzan como el máximo artillero del torneo.

Valencia es el alma de una selección que gana enteros y que tendrá que buscar un punto contra Senegal en la última jornada para estar de nuevo entre los 16 mejores del mundo. Sería el premio al trabajo de un seleccionador, Gustavo Alfaro, que ha convertido a una joven generación de jugadores en una máquina de jugar, con un espíritu muy definido.

A Ecuador le costó bajar de la nube del partido inaugural. Entró timorato al césped del Al

Khalifa y el despiste le costó un tanto a los seis minutos, en un error en el centro del campo de Caicedo que permitió a Klaassen sacar un buen centro que Gakpo envió a las mallas.

Un mazazo para una selección que encadenaba siete duelos con su portería intacta y que se veía obligada a remontar. El desconcierto duró todavía unos minutos, arropados por los gritos de la grada ecuatoriana. El centro del campo era el reino de Frenkie de Jong, que monopolizaba el juego, dueño y señor de la bola.

Alfaro, que había comenzado con un planteamiento más defensivo que frente a Qatar, con tres centrales, se vio obligado a adelantar líneas, obligando a recular a Países Bajos y el partido empezó a jugarse en el terreno de los europeos. Ahí se sumó Valencia, que avisó dos veces antes del descanso. Y en la más clara, tras un córner, Estupiñán logró desviar el balón a la red, pero el colegiado anuló el tanto por considerar que Porozo, en fuera de juego, impedía la visión del portero.

Tras salir de vestuarios, Valencia aprovechó un rechace del portero para lograr el empate. Ecuador se lanzó a una ofensiva que a punto estuvo de permitirle dar la vuelta al marcador cuando Gonzalo Plata estrelló el balón en el larguero con un potente zurdazo. El partido entró en una fase de desgobierno que parecía beneficiar más a la Tri, hasta que a base de ahínco los de Van Gaal recuperaron el hilo. Pero Ecuador tenía subida la adrenalina y cada contacto con el balón era una amenaza constante.

Ecuador amenazó, pero la pólvora de Valencia ya no era suficiente. Un empate que sabe a esperanza.