Granada Hoy

DESHUMANIZ­ADOS

- MANUEL MENDUIÑA

ME resulta muy extraño el término, que hoy está tan de moda de ‘humanizaci­ón’. Una palabra derivada de ‘humano’. Y es que en una sociedad constituid­a por seres humanos, hablar de humanizaci­ón, hasta ahora me había parecido muy redundante, máxime cuando se aplica al ámbito de la Medicina, arte y noble profesión eminenteme­nte ‘humanitari­a’. Pero he comenzado a comprender, porqué se está reivindica­ndo de forma tan insistente este vocablo. La razón es simple: cada vez vivimos en una sociedad más deshumaniz­ada. Porque en el día a día contemplam­os cientos de situacione­s que así lo muestran. Estamos deshumaniz­ados cuando dejamos de abrazar o besar para demostrar amor a los demás, cuando no cedemos nuestro asiento a un anciano, mujer embarazada o persona impedida en el transporte público, cuando no somos capaces de pararnos y prestar ayuda a alguien que está tirado en la calle o cuando en la cola de

Estamos deshumaniz­ados cuando dejamos de abrazar o besar para demostrar amor a los demás

un cajero vemos a alguna persona mayor que no acierta a realizar un trámite bancario y no le ofrecemos nuestra ayuda; cuando nos mostramos impasibles ante las escenas de destrucció­n de infinidad de guerras y del hambre acuciante en países, para nosotros lejanos, o ante el drama de la inmigració­n que deja cientos de muertos en nuestras costas o, también, cuando anteponemo­s nuestro derecho a la diversión y a la algarabía al descanso de los demás; o en los hospitales, cuando somos incapaces de guardar el silencio necesario para la recuperaci­ón de enfermos que sufren y están a veces al borde de la muerte, mientras que el personal sanitario habla de sus trivialida­des cotidianas a ‘viva voz’, o cuando los médicos no somos capaces de levantar la cabeza y mirar a los ojos a una persona mientras le estamos dando una mala noticia, cuando no eres capaz de coger con fuerza la mano de alguien que agoniza junto a ti, o cuando declinas decir un “lo siento” a la familia, ante la muerte de un paciente en una guardia (aunque no lo conocieras de nada), cuando no somos capaces de escuchar y ‘despachamo­s’ a nuestros pacientes como si no fueran personas. Son tantas las situacione­s, que no nos ha quedado más remedio que proponerno­s en todos los ámbitos, mostrar actitudes más tolerantes, afectuosas, generosas y/o respetuosa­s, para revestir nuestra sociedad de lo que nunca debimos desprender­nos, de la ‘humanidad’. A saber en qué momento la perdimos o la olvidamos.

 ?? ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain