Montilla pide evitar discursos racistas y dice que es “cuestión de derechos humanos”
El subdelegado del Gobierno insiste, tras las quejas, que aún está en estudio
No hay novedad. El subdelegado del Gobierno de España en Granada, José Antonio Montilla, volvió ayer a pronunciarse sobre el centro de acogida de migrantes que se plantea frente a la Base Aérea de Armilla, en término municipal de Alhendín. Un recurso, en principio temporal pero con vocación permanente, que que ha generado el rechazo de los tres ayuntamientos afectados (Alhendín, Armilla y Ogíjares por su proximidad) y la inquietud de los vecinos cercanos. Todos coinciden en mostrar su rechazo porque “no es el sitio adecuado” al estar rodeado de pisos, casas, urbanizaciones y centros educativos como colegios y guarderías.
Y la respuesta de Montilla a esta oposición manifestada claramente por los tres alcaldes (los populares Francis Rodríguez y Estéfano Polo y la socialista Loli Cañavate) y el movimiento vecinal abierto en protesta, es clara: “Hablamos de personas que huyen de una guerra, que tienen que estar atendidas y la defensa de los derechos humanos y el respeto a la dignidad de las personas. Por eso se trata de buscar el lugar más adecuado pero desde esa perspectiva y evitando cualquier discurso racista o xenófobo y apelando siempre al diálogo”.
Para el subdelegado, “estas instalaciones son necesarias y son urgentes porque es una cuestión de derechos humanos, de tratar a las personas en situación de dignidad, y no pueden esperar meses. Las personas tienen que ser atendidas de manera adecuada”, dijo. Con todo, insistió en que se están valorando aún los terrenos donde se daría prioridad a la acogida de personas en situación de protección internacional y que piden asilo.