EL HORIZONTE DE LO NUEVO
SOBRE LO NUEVO Y LO QUE VIENE, y sobre esa punzada de deseo que hace diana en el centro mismo del estómago, retortijón y deleite a partes iguales, ante las posibilidades –cientos de miles, y todas deseables y necesarias– que ofrece la nueva temporada. Nuevas siluetas, tejidos sostenibles y estampados tridimensionales; nuevo calzado sideral, grandes joyas y alhajas de diseño y, sobre todo, nuevos códigos en el vestir nos saludan desde las páginas de este número de agosto con un espontáneo ¡hola! tan encantador como una ráfaga de aire fresco que irrumpe por sorpresa en plena ola de calor y que se manifiesta en tecnicolor, como una animación de Daniel Canogar. Toc, toc, de nuevo la llamada de lo nuevo, y valga la redundancia. Y antes de contestar ¿quién es? te encuentras con la novedad ahí mismo, apoltronada en el Charles Eames de la sala de estar y sin puerta de por medio; por obra y gracia de la magia del streaming y de los persistentes globos apostados encima de la app, que anuncian con escandaloso silencio un aquí estoy yo descarado y flamenco. Y sí; ahí está de nuevo lo nuevo, y otra vez la redundancia en sus mil modos y maneras: en el feed de Twitter, la newsletter, el site..., o a bordo de un miniavión de papel que ha desplegado los flaps y se prepara para un aterrizaje forzoso en tu IG directo. Y mientras descargas noticias, te lo vuelves a preguntar: ¿cómo he llegado hasta aquí?, ¿es realmente nuevo lo nuevo? Pero eso fue antes de vislumbrar el indestructible muro de Facebook; antes de detectar por el rabillo del ojo el vibrante y poderoso círculo del IG Stories, Gran Hermano de la vida propia y ajena del que –lo sabes– resulta imposible escapar. Pero a veces sucede y logras desconectar, hasta que el pertinaz trino de un gorrión digital te arroja una vez más a la realidad, ese universo paralelo que hemos llenado de news. Pero eso ya lo has visto y empiezas a dudar, ¿es esto actual o es viejo?, ¿qué me tengo que comprar? En este agosto de relax en la playa y primera mirada a la inédita temporada, concurren nuestras elegidas, las tendencias que desearás llevar.Todo vale en el siglo XXI y por eso hemos querido proponerte un especial con lo mejor de lo que viene. Será porque, tal y como vaticinó a mediados de los 90 el filósofo y matemático Boris Groys, «no hay ningún camino que nos saque de lo nuevo, pues, si lo hubiera, sería un camino nuevo». O tal vez porque «lo nuevo es insoslayable, inevitable e irrenunciable», como después demostró, pero en estas páginas que incorporan la mejor moda en el horizonte, únicamente se pretende contestar a una pregunta: ¿qué se lleva hoy? Solo daré una pista: tras la coronación del street style como poderosa fuerza creativa, inspiradora de tendencias hasta hoy prohibidas en el paraíso de las grandes firmas de moda y lujo –recordemos la aplaudida presentación de Virgil Abloh (Off-White) en Louis Vuitton–, la moda demanda una actualización en la visión del consumidor. Mientras llega, nos hemos dejado seducir por el cowboy de Malibú, las zapatillas siderales y el athleisure, y ya divisamos buen puerto.