ESTA ES LA TIERRA DEL CHAMPÁN MÁS FAMOSO DEL MUNDO
Cerca de tres siglos nos contemplan. 275 años de esfuerzo y dedicación que han visto nacer y crecer la gloria de una familia, los Moët, ejemplificada hoy en tres majestuosas edificaciones que son punto de referencia en la región de Champagne. Nos referimos al Château de Saran, al Hôtel Chandon y la Résidence de Trianon, tres fantásticas propiedades erigidas en torno a unos viñedos excepcionales y que simbolizan como pocas la elegancia francesa. Adelantado a su tiempo, Jean-Rémy Moët (nieto de Claude Moët, el fundador de la saga) se empeñó en inculcar a sus descendientes inequívocos mensajes de generosidad —«Compartamos la magia del champán con el mundo»— y hospitalidad. Porque estos dominios ancestrales son, por encima de todo, un destino en el que dignatarios, invitados de honor y amigos de la casa siempre son bien recibidos. Y así nos sentimos hoy, honrados por estar aquí formando parte de una tierra gloriosa plena en historia y en sabor. Moët & Chandon es el mayor propietario de viñedos de la región ya que sus uvas se extienden a lo largo de 1.180 hectáreas de fértiles parcelas de suelo calcáreo —de las que el 50% se destinan a grands crus y el 25% a premiers crus—. «Nuestras uvas son el noble regalo que la naturaleza nos hace. Mi papel y el de mi equipo consiste en mejorar esa materia prima interpretándola hasta obtener su mejor versión. Elaboramos champán combinando todo nuestro savoir-faire enológico y las últimas tecnologías para transformar las uvas de la forma más delicada y sutil posible», afirma orgulloso Benoît Gouez, enólogo de la casa y una de las figuras internacionales más importantes del champán. Tradición y futuro son sus mantras. La histórica región de Champagne, Épernay, los viñedos, bodegas y mansiones mágicas que dan forma a Moët & Chandon piden a gritos una de esas escapadas otoñales que harán perfectamente feliz al bon vivant que todos llevamos dentro.