CAMBIAR HACIA NUEVOS GESTOS
LOS CHAMPÚS SÓLIDOS VIVEN UN ‘BOOM’ SIN PRECEDENTES. NO GENERAN RESIDUOS PLÁSTICOS, SON BIODEGRADABLES, DURAN EL DOBLE QUE LOS LÍQUIDOS Y CONSTITUYEN LA OPCIÓN PERFECTA PARA VIAJAR. DESCUBRE ALGUNAS DE LAS FÓRMULAS MÁS EXTRAORDINARIAS.
Si hay un tema que estos días acapara la conversación en materia de belleza es el de los champús sólidos. Cada vez más consumidores apuestan por este formato, un gesto que lejos de ser algo baladí resulta tan beneficioso para el planeta como para la propia melena. En primer lugar, este tipo de productos, que conjugan tradición e innovación a partes iguales, se caracterizan por estar compuestos por alrededor de un 95 % de ingredientes naturales. No contienen siliconas, sulfatos, detergentes ni otros agentes nocivos que tienden a asfixiar el cuero cabelludo y el cabello, y a dejar restos que a la larga cuesta mucho eliminar. La experiencia de lavado también resulta diferente –aunque no por ello menos placentera– ya que aunque hacen menos espuma que un champú líquido, tras su uso continuado el pelo adquiere fuerza, brillo y vitalidad, y luce más limpio. Las ventajas en cuanto al cuidado del medioambiente no resultan menos reseñables. Una pastilla equivale a dos botes de champú de 300 ml, lo que para una marca como Yves Rocher supone un ahorro de 30 toneladas de plástico al año respecto a su producción mundial. Además, al estar formulados a base de plantas, arcillas, mantecas y aceites vegetales, se trata de productos biodegrables y no contaminantes. El tema del agua, uno de nuestros bienes más escasos, también resulta llamativo: esta modalidad apenas requiere de agua en su elaboración, del mismo modo que para su aclarado en el momento de la ducha también exige menos.
Todas estas bondades han hecho que actualmente vivamos un boom de la cosmética sólida. No solo una nueva generación de marcas como Rowse, mid/ night 00.00 o Vera & the birds apuestan por esta forma de cuidado capilar. También firmas consolidadas de la talla de Aveda o Yves Rocher y la enseña de gran consumo Garnier se suman a la revolución con propuestas en pastilla. Sus novedades desmitifican la idea de que las alternativas ecológicas no son eficaces y sensoriales. Tras una minuciosa labor de investigación, las casas más punteras han conseguido aunar protección de la naturaleza con fórmulas extraordinarias que embellecen la melena. La comunidad científica predice que de aquí a 2050 habrá más plástico que peces en el océano. Pero plantarle cara a esta situación de emergencia y ser parte del cambio empieza por pequeños gestos que están a nuestro alcance. Pasarse al champú sólido, en esta época del año, tiene un valor añadido. Cómodo y duradero, este formato es fácil de usar y de transportar, por lo que puede convertirse en el mejor aliado de las vacaciones.
Una pastilla equivale a dos botes de champú líquido de 300 ml.