Aceites preciosos
Por la multitud de beneficios que aportan no solo a la piel, sino al bienestar en general, los aceites esenciales se han convertido en un básico. Bergamota, lavanda, eucalipto, ylang-ylang… Cada uno responde a una necesidad: combatir el acné, prevenir el envejecimiento o armonizar cuerpo y mente. Su éxito es tal que hasta I.C.O.N. creó la línea Hair-Yurvedics para llevar los beneficios de los aceites –moringa y argán, concretamente– al cuidado del cabello.