LA FUENTE DEL LUJO RESPONSABLE
El lujo y la belleza también pueden ser sostenibles y, en el caso de Mugler, esta declaración de intenciones viene llevándose a cabo desde hace 30 años.
Aunque la preocupación por la belleza sostenible ha alcanzado su punto álgido en los últimos años, Mugler lleva practicándola desde 1992. La visión vanguardista de la firma concibió por aquel entonces el primer perfume recargable del mercado, Angel. Hoy, gracias a la Fuente Mugler, las adeptas a los tres perfumes más icónicos de la casa -Angel, Alien y Alien Goddess- pueden recargar sus frascos ad infinitum a través de un exclusivo ritual donde el lujo se vuelve responsable porque el reciclaje de los envases es tan eterno como tu amor por los perfumes. Además, los tapones y los pulverizadores rotos también se pueden reemplazar para mantener intacta la belleza de los frascos, diseñados como auténticas joyas de tocador. Se trata, sin duda, de la mejor forma de ahorrar los recursos del planeta.