Rosín de Palo, cuando basta con una batería y un contrabajo
Rosín de Palo es, sin lugar a dudas, una de las propuestas musicales más sugerentes, frescas y originales de la escena aragonesa actual. Un contrabajo y una batería bastan y sobran a Samuel Azorín y Mario Vidal para ir coleccionando hitos en una carrera alejada de las autopistas principales, pero sumamente interesante.
Su apabullante naturalidad fue captada el año pasado en una edición íntegra de ‘Los conciertos de Radio 3’ que fue retransmitida por La 2. También quedó plasmada en una ‘performance’ que ejecutaron en marzo con un paracaídas multicolor sobre la bola del mundo gigante que habita en la plaza del Pilar. O en su primer álbum, ‘Lo que dura un recreo’, editado en febrero y que no llega a los 20 minutos de duración.
«Nos gusta definir nuestra faceta musical como algo espontáneo, natural. Puede sonar típico pero como algún buen rapero dijo, definirse es limitarse. Se lo dejamos a los especialistas», afirma Mario Vidal, el dueño y señor de la batería.
Su vocación por crear y subvertir el orden lógico de las cosas nació en su infancia. «Desde pequeñitos empezamos en el conservatorio. Yo siempre he estado envuelto en un ambiente musical en casa (mi padre tocaba la batería en algún grupo) y a Samu siempre le ha movido la música desde pequeño. Y la vocación en el proyecto fue desde el principio... ya la primera vez que tocamos nos dimos cuenta que con solo una batería y un contrabajo podíamos hacer canciones», revela.
Pese a su descarada juventud –apenas superan la veintena– conservan en su memoria un cada vez más poblado álbum de éxitos. «Tenemos muchos muchos muchos ‘momentos top’ y anécdotas que siempre están presentes y de alguna manera recordamos continuamente. Guardamos como uno de los primeros y momentos más espectaculares obviamente la final del concurso Ambar Z... pero luego también nuestra primera gira hace dos años, que consistió en hacer una semana de conciertos seguida por España o la primera vez que salimos fuera a tocar a Lisboa. Un buen hito fue tocar por primera vez el disco ‘Lo que dura un recreo’ en el propio patio de recreo de un cole», concluye.
Y en octubre seguirán cumpliendo sueños con el anuncio de nuevos conciertos en el extranjero. Suma y sigue.
SUS PRÓXIMOS CONCIERTOS
En septiembre Rosín de Palo hará una minigira por las salas Siroco de Madrid (15), Gorila de Zaragoza (16), Heliogabal de Barcelona (17) y 16 Toneladas de Valencia (18).