Trágico fin de semana en el Pirineo con una caída mortal y otro fallecido por un infarto

● La víctima del pico Brazatos (Panticosa) es una joven navarra de 22 años que se despeñó 50 metros

HUESCA. Fin de semana trágico en el Pirineo. A la muerte de una montañera navarra de 22 años tras despeñarse 50 metros en el pico Brazatos, en Panticosa, hay que sumar otro fallecido, aunque en este caso no fue por un accidente sino por un infarto en el pico Cabalera (Gistaín). La víctima es un vecino de Castelldefels (Barcelona) de 65 años. En total, la Guardia Civil efectuó nueve rescates en dos días.

Según informó ayer la Benemérita, sobre las 15.20 del sábado recibieron un aviso comunicando que una persona que se encontraba en el pico Brazatos había visto hacía una hora cómo otras persona se despeñaba en una canal que da acceso al peña Brazato, quedando el cuerpo tendido en las piedras. Tras ello, inició el descenso hacia los ibones de Brazatos en busca de cobertura móvil para llamar al 112.

Los especialistas del Greim de Panticosa, la Unidad Aérea de Huesca y el médico del 061 localizaron un cuerpo tendido de una mujer tapado con ropa, además de otra persona en medio de la canal paralizada en estado de shock y que tuvo que ser rescatada por un socorrista con la ayuda de un rápel al no disponer de arnés ni de elementos de protección. El cadáver de su compañera fue evacuado a Panticosa y de allí al Hospital de Jaca.

Poco después, llegó un nuevo aviso de una persona que estaba realizando una ruta al pico Cabalera, en la zona de Puerto de la Madera, y que había sufrido una parada cardio-respiratoria y no respondía a estímulos. Especialistas del Greim de Boltaña junto a la Unidad Aérea de Benasque y un médico de 061 encontraron a la persona infartada junto a un grupo de personas que intentaban reanimarla. La médico y los socorristas les cogieron el relevo pero solo pudieron certificar su muerte y evacuar a la víctima a la helisuperficie de Benasque.

El sábado hubo otros cinco rescates. En uno de ellos, un hombre de 30 años y una mujer de 28, ambos vecinos de Granada, pidieron ayuda después de quedarse enriscados cuando hacían senderismo desde la localidad de Lafortunada por el GR-15, al llegar a una zona de roca descompuesta. Fueron localizados en una zona herbosa de difícil acceso y tras ayudarles a rebasar la parte de roca suelta, les evacuaron ilesos.

15 m de cable del helicóptero

También rescataron a un montañero barcelonés de 29 años con un posible esguince de tobillo en el refugio de Góriz; a un senderista de 47 años y vecino de Madrid que se adelantó cuando ascendía con otros compañeros al pico de Troumousse (Bielsa); a un bañista de 53 años y vecino de Zaragoza con una lesión en el tobillo derecho que no podía continuar caminando en las pozas de Belsué, en Nocito, y que obligó a los especialistas y al sanitario a descender 15 metros con el cable de la grúa del helicóptero para poder asistirle; y a dos senderistas de 35 y 34 años, vecinas de Santander y Mataró (Barcelona), que se extraviaron en la zona de las Crestas del Balced (Bierge).

Mientras, ayer fueron auxiliados dos ciclistas: uno de 60 años tras sufrir una caída en la zona de Panticosa; y otro por una causa similar en Pueyo de Araguás, según informó la Guardia Civil.