Semana difícil en el vacuno
Semana difícil, marcada por el festivo del martes 1 de noviembre, que divide la semana en dos y complica tanto los sacrificios, como también la comercialización. Se llega a ayer con la sensación de un paréntesis y de que se inicia la semana y esto trae consigo incertidumbre al mercado, pero con unos precios que continúan alcistas.
La mesa de vacuno, una semana más, está dividida. Por un lado, la producción se muestra alcista en su mayoría. Y, por otro lado, la comercialización, dividida también, se presenta con discrepancias y con dificultades en la venta de algunas piezas más caras, aunque, por el contrario, las piezas más económicas soportan las subidas y tienen fluidez y actividad en el mercado.
En realidad, las ventas van despacio, pero se va vendiendo y además llega el frío, que es fundamental en la venta de carne. Debemos recordar que estamos a principio de mes y sin saber qué va a pasar a corto plazo, las opiniones de la mesa continúan alcistas en su mayoría. En Europa, la carne también tienen precios elevados y esta semana, las compras están activas.
Por otro lado, destacar que hay poca oferta de animales para sacrificio y, de momento, se espera que esta situación continúe en el tiempo. En cuanto a los precios, aparece una horquilla según el lugar de destino y el volumen, lo que una diferencia importante en el mismo tipo de ganado.
Mucha tensión y muchas exigencias en el mercado, que pone a prueba las relaciones comerciales y la paciencia de los operadores. A partir de ahora, comienzan unas fechas que tradicionalmente son fechas con ventas de vacuno. Este año, con una compra y una venta muy difíciles que crean tensión en el mercado.