Cuando el resultado no es lo importante

El equipo de 5 años del Oliver se presentó con un niño menos a su partido contra el Montecarlo. Los de La Paz decidieron retirar a uno de los suyos para equilibrar las fuerzas

Con niños (o niñas) de 5 años, lo de menos es el resultado. Esto, que debería ser una obviedad, en ocasiones parece olvidarse. El ejemplo positivo de cómo debe afrontarse un partido con chavales de esta edad se vio el pasado fin de semana en el campo de la UD Montecarlo.

Allí, el equipo visitante, el CD Oliver, se presentó con solo siete jugadores, uno menos de los que debían alinearse sobre el césped.

Empezaron el choque, por tanto, en inferioridad y con muchos minutos por delante. Los entrenadores del Montecarlo, Javier Arcusa y Adrián García, se dieron cuenta de esta circunstancia una vez había comenzado el choque. Entonces pararon el partido, hablaron con el entrenador rival y retiraron a uno de sus jugadores del campo para que el choque se pudiera jugar en igualdad de condiciones.

Néstor Paricio, director deportivo del Montecarlo, señala que «en estos partidos de Escuela el resultado es lo que menos importa». «Tienen que jugar a fútbol, divertirse y aprender de este deporte, porque es su primer año y se están iniciando», añade. El hecho de retirar a un jugador del césped cuando el rival llega con uno menos «es relativamente habitual» en estas categorías, pero «no siempre ocurre».

«Depende del tipo de entrenador que te encuentres», señala Paricio. Sin embargo, en su opinión lo importante a esta edad es «inculcar valores» y «que les empiece a gustar el fútbol». «Tendrías que ver los entrenamientos, porque allí el fútbol es casi lo de menos. Lo de más es que jueguen, se empiecen a compenetrar… Ya tendrán tiempo para competir», apunta. El resultado de partido, lo dicho, fue lo de menos. Lo de más fue el agradecimiento de los entrenadores del Oliver al gesto y la foto que se hicieron todos los chavales juntos al acabar el choque.