Mariona pilota una remotada épica en Gerona
El Casademont canta victoria en un partido que perdía por 19 puntos Un parcial de 13-29 en el último cuarto corona un volteo lleno de fe y mérito
SPAR GIRONA CASADEMONT ZGZ 50 60
Si no fuera porque las conocemos, porque sabemos de lo que son capaces y de lo que serán capaces, habría que frotarse los ojos. Pero no, aunque llegara a perder ayer por 19 puntos en la segunda mitad, el Casademont volvió a demostrar que siempre hay que tener los ojos bien abiertos cuando juega. El épico remonte firmado en Gerona, con un parcial en el último cuarto de 13-29, lo volvió a evidenciar, además de declararle creyente en todo y para todo. Incluso para atravesar la puerta de la gloria de la Euroliga que le espera el próximo miércoles en Turquía. La Liga Femenina Española, por supuesto, es reto superado. Hasta cuando se va perdiendo por casi 20 puntos a domicilio ante un enemigo como el Girona...
Y eso que el prólogo y la primera mitad en Gerona fueron verdaderamente inquietantes. Con Leo Fiebich tocada, enfrente estaba el Girona de Roberto Íñiguez, el conjunto más en forma de la competición, con cuatro victorias consecutivas y la necesidad de volver a ganar para hacerle sentir su aliento en el cogote al Valencia, al Perfumerías Avenida y al propio Casademont. El arranque aragonés fue tan preocupante como su parte médico. Con Leo Fiebich entre algodones, Cantero apostó de salida por Mariona, Atkinson, Holasinska, Vega y Diallo. Una canasta fácil de Magarity y un gorro a
Mariona significaron la carta de presentación de un Girona más activo que un Casademont deficiente en la dicción del ataque estático. Como el Girona no le dejó correr, la casta defensiva quedó como único argumento de un conjunto aragonés absolutamente negado en ataque. Solo una canasta en juego fue capaz de anotar en el primer cuarto. Además, probablemente fue en una falta en ataque de Diallo, en acción de pívot pura.
Pero lo que no le señalaron en ataque a Diallo, los árbitros sí se lo señalaron en defensa, castigando a la pívot gala con la segunda falta antes de cumplirse el minuto 3. Cantero la retiró al banquillo, disminuyéndose sensiblemente la capacidad de intimidación aragonesa. Ya no volvería a anotar en juego el Casademont en el primer cuarto. Apenas tres libres que sumar a la famélica canasta de Diallo al paso por la primera meta volante (10-5, minuto 10). Los mismos cinco puntos que en el último cuarto del último partido liguero, el disputado en Valencia el 2 de febrero.
Y sin Vega, lesionada
Leo Fiebich saltó a la pista, pero el percal no mejoró sensiblemente. Tampoco con la comparecencia del último fichaje, Pointer. Para más inri, Vega Gimeno tuvo que retirarse en el minuto 16 con 17-10 en el luminoso. Todo pintaba fatal para un Casademont que cantaba las canastas como si fueran goles. Eran tan poquitas… Solo una de Geldof y otra de Mariona antes del descanso, y otros poquitos libres para pintar un pírrico 22-10 al intermedio. Peor si cabe era la valoración en el minuto 20: -4. En serio, de pena.
La metamorfosis fue absoluta en la segunda mitad. Encendamos la calculadora o tomemos el lapicero y un trozo de papel para trasladar numéricamente el partidazo que hizo el Casademont en los segundos 20 minutos: 60-10= 50. Sí, sí, 50 puntos en la segunda mitad, con una exhibición subrayada por los 29 puntos del último cuarto. Y eso que el Girona intensificó su dominio en el inicio del segundo acto. Llegó a mandar por 19 puntos. Por momentos, llegamos a tiritar pensando en los 27 puntos de ventaja del partido de ida. Hasta Cantero puso en zona a su equipo… Pero el Casademont no muere nunca. Mariona tomó la batuta y el Casademont comenzó a danzar: triple de Leo y bandeja de Mariona. Parcial 0-5. Íñiguez lo intentó parar con un tiempo. Pidió un tiempo, decía, pero no lo paró. Menudas son estas chicas… Mete Mariona, mete Atkinson, mete Diallo, mete otra vez Mariona. Parcial 2-13, que es 15-21 como resumen sintético del tercer cuarto, y 37-31 como marcador al paso del partido por el minuto 30. Todos respiramos: el ‘average’, al menos, estaba salvado.
Pero qué digo ‘average’. Las chicas del Casademont querían el partido. Y el partido se llevaron con todas de la ley y con un parcial final de 13-29 que no necesita de más glosas de las que denotan los dígitos. Exhibición total y absoluta de baloncesto. Se da por supuesta la solidez estructural atrás. Delante, triple de Petra Holesinska, otro triple de Petra, triple de Mariona, otro triple de Mariona, dos triples más de Petra… Diallo también sumó desde la pintura, hasta cerrar Atkinson un triunfo para avituallarse de razones y de moral ante la trascendental cita de este miércoles. Una cita para la historia después de haber completado una remontada para la historia.