Díaz Ayuso acusa a Sánchez de querer destruirla y denuncia una «inspección salvaje» a su pareja
Asegura que es Hacienda quien le debe 600.000 euros a su novio y desliga su actividad laboral de la Comunidad de Madrid
MADRID. Isabel Díaz Ayuso decidió ayer pasar al ataque total y salir en tromba contra Pedro Sánchez después de que él pidiese durante la sesión de control en el Congreso su dimisión por la investigación fiscal contra su pareja. La presidenta de la Comunidad de Madrid se presentó –en una rueda de prensa tras el Consejo de Gobierno del Ejecutivo autonómico– como víctima de una persecución política orquestada por el PSOE para tapar el escándalo del caso Koldo y la tramitación de la ley de amnistía –la cual el Congreso aprobará hoy en un pleno extraordinario–.
La dirigente popular centró su intervención en tratar de atribuir la investigación a Alberto Gómez Amador –a quien se le acusa de haber cometido fraude fiscal por un supuesto desfalco de 350.000 euros a través de sus sociedades– a «una inspección salvaje» y «sacada de quicio» por parte de la Agencia Tributaria. «Es falso que le deba dinero a Hacienda, es Hacienda quien le debe casi 600.000 euros a pagar por intereses», dijo la líder madrileña desde Leganés –allí se celebró el Consejo de Gobierno de su ejecutivo–.
Además, quiso «aclarar que no hay un solo contrato con la Comunidad de Madrid» en las acusaciones que se están haciendo por la actividad laboral de su novio. «Es un ciudadano particular que está siendo asediado por todo el poder de un Estado porque es mi pareja. ¿Hablaríamos de todo esto si no fuera mi pareja? ¿Cuántos millones de inspecciones hay en España al año?».
Ayuso utilizó un tono especialmente brusco contra Sánchez, acusándole de estar «asentado en la corrupción política y económica» y poniendo como ejemplo el hecho de que «sigue sin exigir su acta de diputada a la señora Armengol y al ministro Torres» –los ejecutivos que presidían durante la pandemia ambos dirigentes socialistas formalizaron contratos con la trama del asesor del exministro José Luis Ábalos–. «El presidente del Gobierno, que mañana –por hoy–va a aprobar la ley más corrupta de la democracia, que amnistía a delincuentes y presuntos terroristas, ha pedido mi dimisión, imagino que para intentar tapar ese escándalo», dijo una Ayuso que hizo referencia varias ocasiones al «nerviosismo» del líder socialista. «Señor Sánchez, relájese. Lo que mejor le conviene es hacer vacaciones en República Dominicana. Tiene vuelo directo, usted lo sabe bien», ironizó.
«Filtraciones»
Ayuso también aprovechó para acusar a la Moncloa de filtrar datos de su pareja, a quien se le señala por percibir dos millones de euros en comisiones por mediar en la compraventa de material sanitario –y que, según la investigación, sería el origen del fraude fiscal– y la compra de un Maserati. «Lo más turbio es ver a los
Alberto González Amador, la pareja de Isabel Díaz Ayuso, adquirió en marzo de 2021 un vehículo de lujo de la marca italiana Maserati, modelo Ghibli, valorado en unos 80.000 euros. Esta compra se realizó a través de una de las empresas de la que es administrador único, Maxwell Cremona. La misma mercantil que ha sido denunciada por la Fiscalía Provincial de Madrid por formar parte de un entramado societario para eludir el pago de impuestos y emitir facturas falsas.
El Maserati, matriculado en abril de 2017, fue comprado por el denunciado después de recibir 1,97 millones en concepto de comisiones por «intermediar» en la compraventa de material sanitario en favor de la empresa catalana FCS Select Products, una de las principales contratistas del Ministerio de Sanidad en el peor momento de la pandemia en 2020.
poderes del Estado filtrando datos de un particular para intentar destruir a un político», refiriéndose a ella misma. La casa que su pareja se compró y donde vive con ella «está comprada, hipotecada, no pagada con un rulo, como otros». «Yo soy libre de subirme en ese coche o meterme en esa cama. No tengo que dar por eso más explicaciones», dijo.
La presidenta regional incluso hizo referencia a su propia familia, en concreto, a sus padres y a su hermano, tras las informaciones que les han vinculado con distintos casos en los últimos años. «Mi padre murió sin tener un duro siendo un hombre honrado, mi madre no ha dado ningún pelotazo y lleva ya muchos años jubilada, con mi expareja no tengo relación alguna y mi hermano es un comercial como tantos otros comerciales de este país con 30 años de experiencia», concluyó.