La permanencia, a un paso
El Casademont se halla a un solo paso de la salvación: le basta con ganar uno de sus últimos cinco encuentros o con una única derrota del Obradoiro
ZARAGOZA. El Casademont se halla a escasos centímetros de la salvación. Cuando restan cinco jornadas para que finalice la competición regular, al cuadro aragonés le basta una victoria, o una derrota del Obradoiro, para consumar la permanencia en la máxima categoría nacional. Después de una primera vuelta de fatalidades, de continuas desventuras, el conjunto de Porfirio Fisac se halla en la actualidad en una situación desahogada, sin excesivos sobresaltos, tras haber facturado 11 triunfos en los 29 encuentros disputados; solamente una carambola sorprendente, muy poco probable, despeñaría a los zaragozanos a la Liga LEB Oro.
Pese a la derrota del pasado sábado en Málaga (83-72), el Casademont mantiene una renta de cuatro partidos con respecto al Obradoiro, el penúltimo clasificado, al margen de tener favorable el ‘basketaverage’ particular. En este sentido, el cuadro aragonés dobló la rodilla en Santiago de Compostela, en el partido de la primera vuelta, por ocho puntos de distancia (80-72); pero se impuso por 19 tantos después, el pasado 6 de abril, en el encuentro celebrado en el pabellón Príncipe Felipe (98-79). En caso de empate a victorias, el Obradoiro nunca superará a los zaragozanos en la clasificación.
Al equipo gallego, además, le sobreviene un calendario de altura en esta recta final de la temporada. De momento, afronta ahora dos desplazamientos seguidos, primero a Bilbao y posteriormente a Madrid –ante un adversario inmerso en la lucha por el liderato–; luego de medirá con el Andorra y el Palencia, dos rivales directos en la lucha por la salvación; y cerrará el torneo en casa, frente a un Joventut de Badalona que aspira a colarse en las posiciones de ‘play off’. Cualquier derrota del Obradoiro conllevaría la salvación matemática del Casademont, que se enfrentará en los próximos duelos con el Real Madrid, el Manresa y el Granada, en el pabellón Príncipe Felipe, y con el UCAM Murcia y el Girona fuera de su casa.
Tampoco el Palencia, colista de la Liga Endesa, puede rebasar en la tabla al Casademont. La escuadra de Luis Guil contabiliza cinco triunfos en el presente ejercicio, cuando faltan cinco únicas jornadas para el término del campeonato regular. Su situación es angustiosa, de máximo riesgo, pero se resiste a caer. Cerrará el curso contra Granada, Baskonia, Bilbao, Obradoiro y Unicaja.
El Andorra y el Girona, ambos con 10 victorias, siguen amenazados por el peligro. Los catalanes