Los conductores del bus valoran paros ante la falta de avances en la negociación del convenio
El comité decidirá qué hacer en el pleno de mañana, aunque cualquier propuesta será votada por la plantilla Critican que Avanza hable de congelación salarial
ZARAGOZA. Los conductores del bus urbano valoran ya nuevos paros ante la falta de avances en la negociación del convenio. La decisión, que deberá ser refrendada posteriormente en referéndum por la plantilla, la tomarán mañana en pleno ordinario tras seis reuniones con Avanza que, según el presidente del comité de empresa, José Manuel Montañés, «han sido un auténtico desastre».
«Es bastante probable que se convoquen paros. No queremos estar tres años negociando el convenio», aseguró durante la concentración convocada ayer delante de la caseta de Avanza en la plaza de Aragón.
El comité denunció el convenio el 30 de noviembre y las negociaciones empezaron en enero. «Desde entonces ha sido un ‘no’ a todo. Este miércoles se han descolgado y han propuesto una congelación salarial. Quieren que este sean un convenio de transición», afirmó Montañés. Desde Avanza, no obstante, sostienen que el comité estaba pidiendo «una subida del 16% cada año durante tres ejercicios», por lo que, una vez hecha la valoración económica, se les ha trasladado que «el único escenario posible» era «la aplicación del convenio actual», en el que, tras 650 días de conflicto, lograron un incremento equivalente al 75% de la suma de los IPC de 2020, 2021, 2022 y 2023 y descansos de fines de semana completos para el 50% de la plantilla.
La plataforma entregada a principios de año contemplaba una nueva subida salarial «del Índice de Precios al Consumo (IPC) más un 3%» y una reducción de jornada a siete horas. «No pretendemos conseguir todo tal y como está. Todo se puede hablar, pero hay que negociar. El tema de fichar a las entradas y salidas sigue siendo tabú. Lo fue durante la anterior negociación y sigue siéndolo, pero se tiene que solucionar en este nuevo convenio», dijo Montañés.
En un principio, la plantilla planteó que el nuevo marco de referencia tuviese una duración de tres años, aunque la multinacional habría propuesto ampliarlo a cuatro, una opción que el comité no ve con malos ojos. Solo para este mes se habían acordado cuatro reuniones. Hasta la fecha se han producido tres, estando prevista la última el próximo miércoles. «Pero si no ha pasado nada hasta ahora, tampoco esperamos grandes novedades», apuntó.
La movilización de ayer fue la
Industrial de Feriantes de Aragón, Ángel Barata, para abordar la polémica de las tasas, que podría dejar a Zaragoza sin ferias por San Jorge. Desde la FABZ pidieron ayer «seguir aplicando los criterios de años anteriores» ante un problema que afecta a primera convocada en el marco de la negociación del nuevo convenio, pero el calendario no termina ahí. El Colectivo Unitario de Trabajadores (CUT), tercer sindicato con más peso en el comité, llama también a concentrarse el próximo día 25 en la plaza del Pilar contra lo que consideran una «prórroga fraudulenta». En la protesta pedirán la dimisión de la alcaldesa, Natalia Chueca, como «causante última» de esta situación.
entre 80 y 100 personas «cuyo modus vivendi no es otro que ir de barrio en barrio con sus atracciones». «Se trata de gente de muy difícil recolocación debido a su formación y a que no han desarrollado ningún otro tipo de oficio», explicaron. En respuesta, Mendoza subrayó que la ley «debe ser igual para todos» y que el Ayuntamiento «debe hacer cumplir las normas» y no actuar «dependiendo de si soy amigo o de si cambio de opinión». «Le trasladaré la postura del Gobierno y escucharé lo que me quiera decir», apuntó.