¿SABÍAS QUE…?
La concentración de toros ibéricos en Monforte del Cid lo sitúa en uno de los enclaves de máxima importancia para el estudio del rito funerario íbero. De acuerdo con la entrevista que mantenemos con Luisa Pastor, técnico de Cultura del Ayuntamiento de Monforte del Cid, se piensa que la localidad acogía una importantísima necrópolis aunque todavía no se ha encontrado. Además, “nuestro pueblo constituye un área geográfica importantísima debido al labrado de las esculturas”, añadía Luisa Pastor. Todavía hay muchos misterios por resolver, según nos explica. Hay muchas preguntas que todavía buscan respuestas: ¿Por qué Monforte del Cid era un lugar de culto? Según nos explica nuestra amiga monfortina, parece ser que en la antigüedad, el lugar era un punto de encuentro y cruce de caminos importante. Junto a los restos prehistóricos, en el Museo Arqueológico íbero de Monforte del Cid, se encuentran también importantes piezas romanas procedentes de excavaciones y yacimientos de gran envergadura. El Valle que ocupa el municipio era muy propicio para el aprovechamiento agrícola y estaba surcado por los cursos fluviales del río Vinalopó, el río Tarafá y la Rambla de Orito. Donde había agua, había vida, había asentamientos, villas… La llamada “Mansio Aspis” podría estar en el paraje monfortino de los Baños, conformado un núcleo principal de las centuriaciones romanas del Medio Vinalopó. Luisa Pastor nos comenta que la Mansio Aspis era el lugar donde la milicia romana podía descansar, una especie de base y campamento militar de descanso esto significaría que Monforte del Cid era un cruce de caminos, un punto de encuentro en el que confluían, también, las civilizaciones, puesto que se han encontrado algunos exvotos íberos en yacimientos romanos monfortinos, tales como el de la pequeña figurita de un toro labrado en metal. Cabe destacar, en este sentido, que si encontramos pistas de yacimientos y piezas arqueológicas romanas que sugieran la importancia del enclave en esa era, es de suponer que teniendo en cuenta que cada nuevo importante asentamiento de una civilización se producía sobre la base de otro importante asentamiento de una civilización previa, tendríamos muchos motivos para pensar que bajo las tierras monfortinas todavía quedan muchos misterios, tesoros y secretos por descubrir.