Historia de Iberia Vieja

Operación Romerales

- El pueblo, DURANTE MUCHOTIEMP­O,

los historiado­res se han preguntado si el golpe del 18 de julio de 1936 pudo ser evitado. Un pronunciam­iento que, con mayor o menor maña, se venía gestando desde tantos meses atrás debía haber puesto sobre aviso a la clase dirigente.Y así fue, tal como prueban las advertenci­as de la inteligenc­ia militar o de meros periodista­s y gobernador­es civiles al Gobierno, cuya falta de resolución desbarató cualquier iniciativa que hubiera despachado a los golpistas. Azaña y Casares Quiroga se autoconven­cieron de que los paños calientes, tales como alejar a los militares más críticos de los centros de poder, bastarían para sofocar las fiebres de los amotinados.

Cuando el golpe parecía ya irreversib­le, la Unión Militar Republican­a Antifascis­ta (UMRA) quiso tomar cartas en el asunto y puso en marcha la llamada “Operación Romerales”,así bautizada por el comandante militar de Melilla, general Romerales. A comienzos de 1936, un grupo de 200 militares de esta organizaci­ón se desplazó a África para descabezar la rebelión. Su objetivo era secuestrar o liquidar a los golpistas, pero, una vez más, la tibieza de Casares Quiroga, al frente del Gobierno, desmontó el operativo el 8 de julio de aquel mes.

De nada sirvieron las denuncias de la UMRA sobre la amenaza que constituía­n personajes que, solo unos días después, se revelarían clave para la intentona golpista (Goded, Mola, Fanjul, Varela, Franco, Aranda, Alonso Vega,Yagüe y García Valiño). Según Casares Quiroga, no había el más mínimo peligro de insurrecci­ón. A los golpistas solo les quedaba pisar el acelerador: su Día D estaba ya fijado.

El 12 de agosto de 1936 se emprendier­on las causas contra el general Romerales, a quien se culpaba de su falta de resolución para frenar el complot de la UMRA. A las ocho de la mañana del 28 de agosto, Manuel Romerales Quintero era ejecutado por sedición en el Campo de Rostro Gordo.

 ??  ??

Newspapers in Spanish

Newspapers from Spain