Ubaldo Pasarón
de anticipación fue el de Ubaldo Pasarón y Lastra, autor de la singular obra Pilotage [sic] aereonáutico. Hemos saltado a mediados del siglo XIX, décadas antes de que Julio Verne triunfara con sus fantasías científicas. Nos hallamos ante Ubaldo, un ingeniero militar que, además, era poeta y periodista. Se encontraba destinado como capitán en Cuba, lugar en el que publicó una obra de pequeño tamaño que desafiaba la imaginación de sus contemporáneos. Puede que sólo se tratara de un ejercicio de humor, pero el bueno de Ubaldo acertó en su predicción de futuro.
Y, o sólo eso, sino que se atrevió a solicitar patente sobre una nave aérea completamente gobernable, en un tiempo en el que los más primitivos dirigibles luchaban por ser algo más que meras atracciones de feria, faltando muchos años para que fueran perfeccionados. Las primeras apariciones de Ubaldo Pasarón en la Gaceta de La Habana, en 1862, mostraban ya un ingenio que fue tomado a risa. Ahora bien, en los escritos de este pionero de la anticipación fantástica, se ve que la cuestión de las naves aéreas está tratada de forma seria pues, entre aparentes divertimentos inconexos y chistosos, se encuentran cálculos, propuestas sobre control de vuelo, propulsión, ideas sobre una red mundial de correo aéreo, transporte de mercancías y pasajeros e incluso ideas acerca del control del tráfico aéreo. Ubaldo Pasarón falleció en 1862, al poco de publicar su obra sobre las naves aéreas, mientras intentaba lograr apoyo oficial para construir un gran dirigible capaz de volar alrededor del mundo.