Las batallas de Rheinfelden

viendo las dificultades para cruzar el Rhin desde Alsacia ideó la osada maniobra de cruzarlo desde la neutral Suiza, pasando por el sur de Basilea. A la altura de Rheinfelden dejó 2.000 soldados en la orilla sur del río para bloquear la villa, y cruzó con el resto para atacarla desde el norte. Werth de nuevo avanzó a marchas forzadas con 3.000 católicos desde Stuttgart, cruzó la Selva Negra y se unió a los 4.000 de Savelli en la región, y juntos atacaron a los 6.000 protestantes de Bernardo el 28 de febrero. La batalla fue indecisa, ya que cada una de las alas de ambos ejércitos se impuso sobre la otra, de modo que, como una puerta giratoria el frente osciló y las tropas de Bernardo quedaron aisladas del vado que habían usado para cruzar el Rhin, quedando separadas de las que estaban en el lado sur. Sin embargo, Bernardo entonces se replegó hacia el este sin cruzar el río, a la vez que daba órdenes a las tropas que estaban al sur para que abandonaran el asedio de Rheinfelden y se unieran con él río arriba, por un vado en Lauffenberg. Sumando de nuevo 8.000 hombres, Bernardo volvió sobre sus pasos y atacó otra vez a los católicos el 3 de marzo. Werth fue cogido totalmente por sorpresa ya que Savelli no había puesto sus tropas en alerta, y hubo de formar precipitadamente tras un canal. A toda velocidad Bernardo asaltó el canal antes de que los católicos se afianzaran, plantó su artillería y bombardeó a las tropas de Savelli que huyeron, dejando a Werth sólo, que fue capturado tras sufrir 6.000 bajas.