Turbio Camino de Santiago
LA CATEDRAL compostelana y el sepulcro del Apóstol Santiago siempre han tenido un atractivo especial y han estado rodeados de un cierto aire de misterio, lo que ha dado lugar a una buena cantidad de relatos y leyendas. Ulises Bértolo, autor de otras novelas muy ingeniosas como La sustancia invisible
de los cielos, ha escrito en Orthodoxia una novela en la que el Sepulcro del Apóstol sigue siendo el centro de atracción.
La novela comienza recordando brevemente las investigaciones de López Ferreiro, que en 1879 culminaron con el descubrimiento de los restos del Apóstol y sus discípulos en el lugar donde habían sido trasladados y que permanecía oculto hasta ese momento. Es un pasaje breve, que sirve de introducción a la historia novelada con la que se construye una trama truculenta.
En ella se ven involucrados una guardia civil novata, Sandra Márquez, a la que encargan investigar el asesinato de un funcionario que se dedica a las bellas artes y un investigador arqueólogo de la Interpol. A la vez entra en liza un peligroso visionario que ha montado toda una red para formar un nuevo orden religioso en el que él será el nuevo Mesías. Se unirá al grupo un personaje compostelano, Caballero de Santiago, investigador de la Orden que pasa por un mal momento familiar.
El autor coquetea con los ingredientes históricos lanzándose a hacer interpretaciones muy personales, que encajan con el tono fantasioso de la novela, llena de intriga y de acción. Como en sus otras novelas, Bértolo construye una arriesgada trama que luego resuelve con habilidad, jugando con los ingredientes y manteniendo en todo momento la tensión./