ESPAÑA, LA COLONIA DE GUINEA
Nuestro colaborador Fernando Ballano ahonda en la historia de la Guinea española con sendos artículos sobre los precios abusivos que la colonia cobraba a la metrópoli por el café y el cacao y sobre el camino a su independencia, de la que este año se celebra el medio siglo. Si en el primer caso abordamos la prosperidad de los nativos a la luz de las estadísticas, en el segundo detallamos el proceso que, en plena descolonización, condujo a la firma de la carta de independencia el 12 de octubre de 1968.
EL 12 DE OCTUBRE SE CUMPLE EL 50 ANIVERSARIO DE LA INDEPENDENCIA DE GUINEA ECUATORIAL, UN CASO MUY ESPECIAL DENTRO DEL COLONIALISMO. EN PRIMER LUGAR FUE UN REGALO “ENVENENADO” DE PORTUGAL EN 1778 A CAMBIO DE UNOS TERRITORIOS EN AMÉRICA DEL SUR. EN SEGUNDO, NO SE TOMÓ POSESIÓN HASTA MUCHO DESPUÉS DE HACERLO GRAN BRETAÑA. EN TERCERO, AL INSTALARSE LOS ESPAÑOLES EN LA ISLA DE FERNANDO PÓO –ACTUAL BIOKO– YA HABÍA UNA ÉLITE DE AFRICANOS –LOS LLAMADOS FERNANDINOS– DE OTRAS COLONIAS BRITÁNICAS QUE POSEÍAN TIERRAS Y ESCLAVOS. EN CUARTO, CON EL FRANQUISMO SE CONVIRTIÓ EN EL DORADO DE UNOS PRIVILEGIADOS Y DE LA POBLACIÓN AUTÓCTONA EN GENERAL, CON UN NIVEL DE VIDA SUPERIOR AL DE LA METRÓPOLI. ASÍ SE PRODUJO EL CAMINO A SU INDEPENDENCIA…
En 1955 España fue admitida en la ONU. En febrero del 1956, esta le recordó las obligaciones libremente contraídas al firmar la Declaración relativa a los territorios no autónomos (colonias). España contestó que no tenía ninguno tras la devolución del protectorado de Marruecos, ya que el resto de las posesiones eran provincias. Para ello provincializará los territorios de Guinea, Ifni y Sahara. En agosto de 1956, la Dirección General de Marruecos y Colonias pasa a denominarse Dirección General de Plazas y Provincias Africanas. Curiosamente, las islas Canarias no se incluyeron en las provincias africanas. El uno de enero de 1958 se cambia la denominación de Territorios Españoles del Golfo de Guinea por el de Provincia Ecuatorial. Con la ley de provincialización de 30 de julio de 1959, la Provincia Ecuatorial se convierte en una nueva región (Región Ecuatorial) y dos provincias (Fernando Póo y Río Muni). Los nativos de estos territorios pasan a ser españoles con Documento Nacional de Identidad, con los pocos derechos que se podían disfrutar entonces; y con casi todos los deberes que se debían soportar (no realizaban el servicio militar obligatorio).
En 1960 se envían seis representantes (procuradores) a las Cortes orgánicas (tres de origen peninsular y tres africanos). Por ello, calificar a la diputada de Podemos, Rita Bosaho, en 2015, como primer representante de raza negra en las Cortes es inexacto. En 1964 todos los procuradores pasarán a ser nacidos en las provincias ecuatoriales y se nombra a Wilwardo Jones Niger –hijo de Maximiliano Jones– como alcalde de Santa Isabel.
El 20 de noviembre de 1959 (otros lo sitúan en 1958) el independentista Acacio Mañé es detenido, asesinado y su cuerpo tirado al mar. Los de su grupo marchan al exilio. Rafael Galbe Pueyo, Presidente del Tribunal Superior de Justicia de Guinea, procesa al gobernador, pero enseguida llega una resolución de Madrid ordenando el archivo del caso. No olvidemos que no había separación de poderes…
El otro mártir de la independencia guineana fue Enrique Nvo, líder del partido Idea Popular de Guinea Ecuatorial (IPGE). Sobre
EL 20 DE NOVIEMBRE DE 1959 ACACIO MAÑÉ FUE DETENIDO, ASESINADO Y SU CUERPO TIRADO AL MAR. EL OTRO MÁRTIR DE LA INDEPENDENCIA FUE ENRIQUE NVO
su muerte hay dos teorías. Una de ellas dice que huyó a Camerún para, desde allí, denunciar la provincialización ante la ONU. Pero, por esa época, los exiliados guineanos habían cedido a las pretensiones de los cameruneses de federarse con ellos una vez conseguida la independencia. Nvo se negó y parece ser que fue asesinado. La otra teoría dice que fue asesinado por guineanos a sueldo del gobernador. Nvo fue maestro desde 1926. En 1947 fue propuesto para subgobernador de Río Muni. En 1959 se peleó con unos blancos en Micomeseng y se hizo independentista. La independencia de Guinea cuenta con un
mártir totalmente demostrado, Mañé, y otro que quizás cayó asesinado por sus propios correligionarios por disensiones internas, Nvo.
EL EJERCICIO DE LA LIBERTAD
En octubre de 1962, Carrero Blanco visitó Santa Isabel y se le entregó una solicitud de independencia. En un discurso al día siguiente dijo: “si un día la mayoría deseara modificar en algún aspecto su estatuto actual, España no crearía ningún obstáculo”. Además explicó “que el gasto del Estado era mayor en Guinea que en la España metropolitana: 1.825 pesetas per cápita, comparadas con 1.800”. Según Pelissier, el 15 de octubre, Kwame Nkrumah, presidente de Ghana, en la apertura de su parlamento, hizo referencia a “nuestros hermanos oprimidos y luchadores por la libertad en Rodesia, Mozambique,
EN OCTUBRE DE 1962, CARRERO BLANCO VISITÓ SANTA ISABEL Y SE LE ENTREGÓ UNA SOLICITUD DE INDEPENDENCIA
Angola y África del Sur y del Oeste [actual Namibia] pero no hizo ninguna referencia a Guinea”.
Tras el asunto de Acacio Mañé, el gobernador Faustino Ruiz, fue sustituido en 1962 por Francisco Núñez Rodríguez y, como dice Nsue “la política virulenta anterior se sustituye con la del dialogo, persuasión y sensibilización”. Según Ndongo, en España en Guinea, el nuevo gobernador era más permisivo: “Aunque se movían en la clandestinidad, una copia del programa de la Cruzada cayó en manos de la policía, y esta vez, sin detenciones, los nacionalistas empezaron a tener una cierta audiencia en el Gobierno General, cuyo secretario, José Mª de la Guardia y Oya, se reunía frecuentemente con los Dougan [fernandinos]. Esta nueva actitud española tenía un doble objetivo: por un lado, restar agresividad al nacionalismo no creando mártires; pero, sobre todo, debilitarlo mediante la captación de una serie de elementos y la infiltración de otros”. […] “El argumento formal esgrimido por España para no conceder (o en todo caso gradualizar) la independencia era, desgraciadamente, cierto:
Guinea Ecuatorial no estaba preparada para el ejercicio de la libertad”.
La lucha armada por la independencia ocasionó cuatro muertos en 1962 cuando unos nativos atacaron con armas de fuego a dos guardias civiles. Estos fueron heridos pero respondieron y acabaron con cuatro atacantes. Pelissier los compara con los 30 o 40.000 que habían matado los portugueses en la Angola de 1961.
LA AUTONOMÍA, UNA SORPRESA
El 9 de agosto de 1963 Manuel Fraga anuncia que van a conceder la autonomía a Guinea. El anuncio sorprendió tanto a los independentistas que el 31 de agosto, en un manifiesto de los dos grupos que estaban exiliados en Camerún, agradecían a Franco el paso dado hacia la liberación de los pueblos colonizados y solicitaban la libertad de los prisioneros políticos, garantías a la seguridad individual, libertad de opinión, prensa y asociación, la admisión de los exiliados políticos (algo que también se pedía en la metrópoli pero no se concedía) y un gobierno nativo.
El 4 de noviembre de 1963, Enrique Gori Molubela, fernandino proespañol, escribe en la revista Ébano: “que nadie venga a engañar ahora al pueblo de Guinea, con que vote por la independencia prematura, en vez de autonomía progresiva. La emancipación de los pueblos exige la madurez en los tres aspectos: político, económico y social. ¡No pasemos de un colonialismo blanco a un colonialismo negro!” En el referéndum de 1963 la isla de Fernando Poo –etnia bubi y fernandinos– vota en contra de la autonomía y la parte continental de Río Muni –etnia fang– a favor.
Durante el año 63 se desarrolló el Proyecto de Ley de bases de Guinea Ecuatorial, que se aprobó en las Cortes franquistas el 28 de noviembre. Posteriormente se votó en referéndum como proyecto de autonomía el 15 de diciembre. Tras ser aprobado, se publicó la Ley de Autonomía el 20 de diciembre, para entrar en vigor el 1 de enero de 1964 con un gobierno totalmente nativo. Enseguida se nombraron 12 alféreces nativos para la Guardia Territorial, entre ellos Teodoro Obiang Nguema.
Tras el fracaso del pretexto de la provincialización, para librarse de las exigencias de autodeterminación (una cosa es autodeterminación –de una colonia– y otra secesión –de una parte de un Estado–) por parte de
EL 9 DE AGOSTO DE 1963 MANUEL FRAGA ANUNCIÓ QUE CONCEDERÍAN LA AUTONOMÍA A GUINEA Y LOS INDEPENDENTISTAS SE LO AGRADECIERON A FRANCO
la ONU y la continua presión de esta, a partir del 1 de enero de 1964 Guinea se gobernó por un sistema de autonomía con todos los cargos en manos de nativos, con la ayuda de un asesor jurídico (José Menéndez Hernández) y bajo la supervisión de un Comisario General metropolitano que sustituía al cargo de gobernador. Lo único que quedó en manos de Madrid fueron defensa, presupuesto y asuntos exteriores.
El 11 de enero se convocan elecciones para ayuntamientos, diputaciones y Asamblea General. Santa Isabel y Bata eligen alcaldes negros (Abilio Balboa y Pedro Lumu). En mayo se elige un gobierno autónomo, con muchas rivalidades internas e interétnicas, que también se daban entre los de la isla y
los del continente, pues, como decía Enrique Gori, Fernando Póo producía el 81% y recibía el 19%, además de encontrarse a 300 kilómetros de distancia de Río Muni. Algunos autores plantean que la rivalidad entre bubis y fang la crearon los españoles. Aparte de ser una falta de respeto a la inteligencia de los guineanos, los bubis saben muy bien todo el maltrato que sufrieron desde el principio por parte de los fang, lo mismo que los playeros –tribus de la costa del continente–, que sufrieron la invasión fang mucho antes de la llegada de los españoles.
CASTIELLA Y CARRERO BLANCO
En 1965 la ONU, ante la demanda de los indígenas, le pide a España que señale fecha para la concesión de independencia. Se produce un fuerte conflicto en cuanto al modo de llevarla a efecto entre Castiella, ministro de Asuntos Exteriores, y Carrero Blanco, minispará
LA ONU PIDIÓ A ESPAÑA QUE PUSIERA FECHA PARA LA CONCESIÓN DE INDEPENDENCIA Y CASTIELLA Y CARRERO BLANCO DISPUTARON SOBRE EL PROCESO
tro de Presidencia. En 1966, por un despiste del Comisario General, se autoriza la UGTGE (Unión General de Trabajadores de la Guinea Ecuatorial), mientras se mantenía ilegal en la metrópoli. El 6 de julio de 1967, comienza la guerra de Biafra en el sureste de Nigeria. Las gentes de cierta edad todavía recuerdan las imágenes de los niños biafreños desnutridos. No hemos de olvidar que la mayoría de los nigerianos que trabajaban en Fernando Póo procedían de esa región.
Poco después, el 30 de octubre, comienza en Madrid la Conferencia Constitucional para dotar a Guinea de una carta magna con la que iniciar su funcionamiento. En ella partici- Herrero de Miñón, como asesor de Castiella. En sus memorias (Memorias de estío), el primero, comenta: “Aunque Guinea era una carga económica para el Estado los madereros de Río Muni y los cultivadores españoles de café y cacao en Fernando Póo obtenían notables ventajas de la situación colonial y no regatearon esfuerzos para dificultar la descolonización”. […] “Carrero y Castiella no se hablaban, y menos sobre problemas como el de Guinea, en el que mantenían actitudes dispares”. En ese mismo libro, Herrero de Miñón, que contaba con información reservada de primera mano, comenta que en 1968, en la isla de Fernando Póo, había 40.000 brace-
CUANDO EL 12 DE OCTUBRE SE FIRMÓ LA CARTA DE INDEPENDENCIA, EL 90% DE LA POBLACIÓN ESTABA ESCOLARIZADO: EL MEJOR PORCENTAJE DE TODA ÁFRICA
ros nigerianos legales y 70.000 reales, frente a 15.000 bubis. Además la habitaban unos 3.000 fernandinos y unos 4.000 europeos que no tenían derecho a voto.
Curiosamente, fueron unos territorios en los que, partiendo de una inferioridad de derechos, durante la dictadura franquista consiguieron ejercer los mismos que los metropolitanos a partir de la provincialización de 1959, superarlos mediante el estatuto de autonomía de 1963 y, sobre todo, disfrutar de elecciones generales libres y democráticas (los europeos y sus descendientes no tenían derecho a voto) en 1968, previas a la independencia, lo que era impensable en la metrópoli.
Las negociaciones de la Conferencia Constitucional se alargaron mucho. Macías, con el asesoramiento y el apoyo económico del abogado Antonio García-Trevijano, quien, según Ndongo, representaba a una compañía francesa interesada en invertir en Guinea, consigue que se apruebe la independencia conjunta de la isla y del continente. Es interesante notar que muchos africanos se quejan de que se dividió a los países sin tener en cuenta las etnias que los habitaban. En el caso de Guinea, fueron ellos mismos –los fang– los que desearon formar un Estado con distintas etnias y, lo que es más incomprensible, con unos territorios separados más de
300 kilómetros entre sí. Respecto a que la isla siguiera en manos españolas, como deseaban los isleños, era algo que no se admitía internacionalmente. Sin embargo, la democrática Francia se quedó, y sigue manteniendo, las islas de Guadalupe, Reunión, Martinica, etc., sin que nadie, ni la ONU, les dijera nada. Todo es cuestión de poder e influencia…
LA CARTA DEL 12 DE OCTUBRE
Una vez acordado el proyecto de constitución se inició la carrera electoral. El 9 de julio de 1968 las Cortes autorizaron al Gobierno para conceder la independencia a Guinea y el 27 de julio se votó la Constitución en referéndum entre los guineanos. El 8 de agosto, coincidiendo con la llegada de la delegación de la ONU que había de vigilar la transición, hubo una manifestación de bubis contrarios a la independencia conjunta con Río Muni. Decían que ellos eran 15.000 y los fang 150.000 pero no les hicieron caso. El 16 de agosto se convocaron elecciones presidenciales. El 22 de septiembre tuvo lugar la primera vuelta y el 29 la segunda, en la que ganó Macías.
El 12 de octubre se firmó la carta de independencia. En ese momento estaba escolarizado el 90% de la población en edad escolar. El mejor porcentaje de toda África. Había más médicos por habitante que en la Península. Pelissier resume el periodo colonial como “un feudo de la Armada española, la iglesia católica, los plantadores de cacao catalanes y las compañías madereras”.