LA PROSPERIDAD de los nativos
Algo que se repite con mucha frecuencia, y en lo que están de acuerdo todos, es que la colonia estaba mucho mejor atendida que la metrópoli, como dice el colono Fernando García Gimeno: “Guinea en muchos aspectos estaba en aquellos años 60 mucho mejor que España. Yo enviaba a un trabajador nigeriano al hospital y a la semana ya estaba operado de hernia o de lo que fuese”. Ya sabemos quién lo financiaba.
En 1963 el grado de alfabetización en Nigeria era del 22,6%; y en Guinea del 73,6%. La media de los países africanos alcanzaba el 45,4%. Había un profesor por cada 40 alumnos en Fernando Póo y por cada 70 en Río Muni (en mi pueblo iban 80 niños con la maestra de párvulos). En esta época todas las fuentes extranjeras coinciden en que el alfabetismo en Guinea era superior al de algunas provincias de la metrópoli.
Pelissier abunda sobre la causa de la prosperidad de los nativos: “España paga por su café y su cacao de Guinea precios mucho más altos que los mundiales […] Además de este liberalismo económico bastante inesperado, uno debe mencionar unos servicios sanitarios extraordinariamente buenos”. Tras una visita al nuevo y grandioso hospital de San Carlos (Río Muni) en 1967, Pelissier comenta: “todo está financiado por el muerto de hambre de Oviedo o de Murcia”. En Fernando Póo había una cama de hospital por cada 113 habitantes. En Río Muni una por cada 215. En la España metropolitana contábamos con una por cada 229.