"LAS MOMIAS NOS HABLAN DE NUESTRO PASADO, DE NUESTRO PRESENTE Y DE NUESTRO FUTURO"
Periodista y diseñadora gráfica, Helena R. Olmo ha merecido el VIII Premio Antonio Cebrián de Divulgación Histórica por CSI Momias (Odeón, 2018), un sensacional ensayo que funde su pasión por la ciencia y la arqueología. Las momias nunca pasan de moda. La autora nos explica por qué...
¿Qué encontrará el lector en esta obra?
Espero que tantas sorpresas como me llevaron a mí a escribirla. Jamás habría imaginado que un ensayo ilustrado podría dar cabida a páginas de novela negra mezcladas con las de un anecdotario humorístico, y mucho menos que fuera yo la persona que tuviera el placer de escribirlo.
¿Qué puede aportar el estudio de las momias al conocimiento de la Historia?
Esquivar la muerte es uno de los grandes motores de la innovación a lo largo de la Historia. Fascina descubrir que las momias no son patrimonio exclusivo de Egipto, que la muerte es universal y el miedo también. Que la noción de tránsito y religiosidad estuvieron ahí antes de lo que pensamos, y que desde el primer hombre que pisó la Tierra hasta el último en llegar, seguimos luchando con el mismo ahínco y con todos los medios a nuestro alcance para que nuestro punto y final se convierta en un punto y aparte. El concepto no cambia: preservar el cuerpo para que vuelva a albergar el alma a cualquier precio. Las momias nos hablan de nuestro pasado, de nuestro presente y de nuestro futuro.
¿Cómo surgió tu interés por este tema?
¿Un flechazo? No estoy segura, simplemente siento una enorme atracción por ellas. Están ahí, tan desesperadas por vivir, que tenía que saber por qué. Son mucho más que los despojos de lo que queda de nosotros, son testigos parlantes de quiénes fueron y cómo vivieron o murieron. A veces nos cuentan que la historia no es como creemos, y deberíamos escucharlas. Especialmente a las momias naturales, ellas no fueron manipuladas, no se contaba con su existencia, y en su caso no hablan de fórmulas mágicas de embalsamamiento sino que nos sorprenden con historias de crímenes, civilizaciones fuera de contexto, sacrificios de sangre, supersticiones y creencias ancestrales en crueles deidades y en sus poderes sobre la naturaleza.
Recientemente se ha abierto en Quinto (Zaragoza) un museo dedicado a las momias, el primero de España. ¿Por qué es importante?
El caso de Quinto es excepcional y es un privilegio tenerlo en casa. Sus protagonistas son treinta momias naturales que han sobrevivido a la descomposición gracias a un entorno con las condiciones de humedad y ventilación propicias para ello. Es el tipo de momia que más abunda en Europa, pues desde el siglo XVI la práctica habitual fue que los fallecidos descansaran en las criptas de las iglesias o lugares aledaños. Pero llegó un momento en que la podredumbre era irrespirable en las localidades del Viejo Continente y surgieron decretos napoleónicos que disponían exhumar los cuerpos de los núcleos urbanos para trasladarlos a cementerios extramuros. En España la orden llegó en 1787 de Carlos III y en la iglesia de San Andrés de Toledo también apareció un puñado de momias polvorientas y resecas. Aunque estas tuvieron mala suerte, su sueño fue interrumpido para quedar apiladas como maderos contra la fría pared de la cripta, pues una huelga de enterradores evitó que se completara su traslado.
Ciutadella de Menorca será la sede del XVI Congreso Internacional sobre la Piedra Seca, entre el 26 y el 28 de octubre de este año. Todo un hito que llega con los mejores augurios gracias al rigor de sus instituciones organizadoras: la Société Scientifique Internationale pour l’Ètude Pluridisciplinaire de la Pierre Sèche (S.P.S.) y la Societat Històrico Arqueològica Martí i Bella, (SHAMB), que nuestros lectores conocen sobradamente por las jornadas que hemos cubierto en otras ediciones. A partir del lunes 22 de octubre, la isla dará la bienvenida a los participantes en el taller internacional sobre restauración de una barraca, mientras que el Congreso en sí se inaugurará el viernes 26 en el Instituto de Enseñanza Media Josep Mª Quadrado, sede de esta cita. Desde 1987, se ha venido celebrando este Congreso con carácter bianual, cuyas conferencias se impartirán en inglés, francés, español y catalán con traducción simultánea. La cuota de inscripción oscila entre los 30 y los 180 euros.