... A SANTA TERESA DE JESÚS LA DESENTERRARON Y LE CORTARON LA MANO IZQUIERDA?
Nueve meses después de ser enterrada, Teresa de Jesús fue exhumada y las autoridades vieron que su cuerpo estaba incorrupto. El padre Jerónimo Gracián cortó una de las manos al cadáver y se la cedió al convento de San José de Ávila, no sin antes quedarse con el meñique como reliquia.
La admiración de Santa Teresa y el padre Gracián, treinta años más joven que ella, llegó a cristalizar en un amor platónico. El sacerdote dejó escrito que había amado a Teresa de Jesús más que a ninguna criatura de la tierra, que este amor le proporcionaba “pureza, consuelo y alivio” y que era muy distinto al que suele darse en el mundo. El joven fraile atesoró el dedo hasta que fue hecho prisionero por los turcos, pero lo rescató a cambio de unas sortijas y veinte reales de la época.