Madelman, el juguete que sedujo a Franco
“LOS MADELMAN LO PUEDEN TODO”, DECÍA SU ESLOGAN. SEDUJERON A FRANCO. MARCARON A VARIAS GENERACIONES E INCLUSO HAN SIDO UTILIZADOS COMO ARMA PSICOLÓGICA POR GRUPOS TERRORISTAS Y AGENCIAS DE INTELIGENCIA. SU HISTORIA REFLEJA LA HISTORIA DE ESPAÑA EN LOS ÚLTIMOS 50 AÑOS. Y ES QUE NACIERON COMO UN REFLEJO DE LA SOCIEDAD Y SU DESARROLLO.
1968. El régimen de Franco reprime con mano dura las revueltas estudiantiles que se inician en España, como eco de las protagonizadas por los jóvenes en París, Londres o Praga. ETA se cobra su primera víctima: el guardia civil José Antonio Pardines Arcay. Y Guinea Ecuatorial firma su independencia. Franco necesitaba buenas noticias... Massiel gana el Festival de Eurovisión con su La, la, la y Manuel Benítez, El Cordobés, se convierte en héroe nacional.
Y llegan a las jugueterías de toda España los madelman. Exactamente 50 años después, el Museo Nacional de Antropología de Madrid ha dedicado una exposición monográfica a la historia de los madelman, y su influencia en la sociedad española de los años 60, 70, 80… incluso ahora. Durante meses, la entrada al prestigioso Museo aparecía flanqueada por dos enormes estandartes que representaban a dos de las figuras más legendarias de la serie madelman: el buzo y el astronauta. Y en el medio el cartel con el eslogan de la exposición: “Aún lo pueden todo”. Toda una declaración de intenciones.
HISTORIA DE UN PROYECTO “MADE IN SPAIN”
En los años 50 Manufacturas Delgado se dedicaba a la producción de objetos de plástico desde su fábrica en la calle Tomás Bretón de Madrid. Convertida en In- dustrias Plásticas Madel se traslada a San Martín de la Vega, pero en los 60, cuando la fábrica está a punto de quebrar, es adquirida por dos empresarios con mucha experiencia en el sector y una ambiciosa visión de futuro: Francisco Andrés Pascual y Josep María Arnau.
Arnau, hijo del fundador de la juguetera Exín –responsable de muchos de los juegos que disfrutaron los niños españoles de los 60 en adelante–, acababa de regresar de un viaje a EE.UU. donde las figuras de acción eran la sensación del
LA PRIMERA SERIE DE MADELMAN ERA UN CATÁLOGO DE PROFESIONES: EL MECÁNICO, EL BUZO, EL PILOTO, EL POLICÍA MILITAR… COMO LE GUSTABA AL PARDO, ERAN UNA FUENTE DE INSPIRACIÓN PARA FUTURAS VOCACIONES
momento para los niños americanos. Y esa inspiración puso en marcha el proyecto que salvaría a Madel. Un proyecto que les cayó del cielo… o del Pardo: el Proyecto Atomium, denominado así por la famosa estructura arquitectónica de Bruselas.
El objetivo de Campos y Arnau era adaptar al mercado español el juguete de moda en Estados Unidos, reduciendo el tamaño, pero esto no sugiere ningún complejo de inferioridad por parte de los españoles. El dibujante Alberto Plaza creó los primeros diseños y el escultor Alfonso Díaz –experto en imágenes religiosas– montó el primer prototipo en madera utilizando las piezas que tenía a mano, como las cuentas de un rosario para dotar a la figura de casi todos los movimientos del cuerpo humano. Nada que ver con los muñecos rígidos anteriores. Constatado el éxito de Atomium, se creó el segundo prototipo en resina. Aquellos primeros diseños podían verse en la exposición del Museo de Antropología.
LOS NEGROS PARA SERVIR
Todos los muñecos protagonistas de la primera serie de madelman en los 60 eran de raza blanca. El diseño de la cara –en todos los modelos la misma– está inspirado en Roger Moore, el actor que encarnaba al Santo en la popular serie de TV (19621969), emitida en España a partir de 1964. Madel decidió incluir también, en la serie original, un muñeco de raza negra: el porteador del safari. En los años 60, y en el modelo norteamericano, los negros todavía vivían una segregación que les negaba todo protagonismo, incluso en las figuras de acción para los niños. Hoy esa iniciativa se habría considerado racista.
De alguna manera, la primera serie de madelman era un catálogo de profesiones: el mecánico, el buzo, el piloto, el policía militar… Como le gustaba al Pardo, eran
SEGÚN LA PRENSA DE LA ÉPOCA, LOS MADELMAN QUERÍAN ORIENTAR A LOS NIÑOS ESPAÑOLES PARA ENCONTRAR EL MODELO PROFESIONAL DE SU FUTURO
una fuente de inspiración para futuras vocaciones. Pero Madel incluyó una novedad. Una figura, una vez más inspirada en el cine norteamericano del momento, y que hoy se ha convertido en la pieza más difícil y ambicionada por los coleccionistas. Y es que precisamente en 1968 Stanley Kubrick estrenaba 2001: una odisea del espacio, y Madel convirtió a uno de sus muñecos en el astronauta Dave Bowman. Una opción profesional, lo quisiera o no el Caudillo, bastante inaccesible para los niños españoles de los 60.
ADOLFO SUÁREZ Y LAS MUÑECAS DE LA TRANSICIÓN
A principios de los 70, y ante el inesperado éxito de los madelman, aparecen nuevos modelos. La industria del juguete en España crecía y se sofisticaba. El cambio más sintomático es que, junto al madelman clásico, rubio y de rasgos británicos, aparece un nuevo modelo, moreno, y de aspecto mediterráneo, sospechosamente parecido al presidente Alfonso Suárez. De hecho así se conoce entre los coleccionistas: el madelman tipo Suárez.
La gran revolución fue la aparición del primer madelman mujer: la madelwoman. En los setenta y los ochenta llegaron los primeros vehículos: coches jeep, canoas indias, helicópteros, caravanas del oeste, lanzaderas submarinas, balsas piratas… Madel acrecentaba la oferta de los
madelman incluyendo los animales de la misión safari, o los caballos de la serie del oeste, y el tipi de los indios. Otra de las piezas raras más buscadas hoy por los coleccionistas.
Con la serie del oeste se incorporaron nuevos diseños de caras y cuerpos. Algunos de ellos fueron usados después en la serie Cosmic, donde por primera vez aparece un madelman no humano: el extraterrestre “hombre verde” de la serie
Cosmic. En la segunda época, por cierto, aparecía una nueva versión del astronauta de 2001, una odisea del espacio con la nueva cara inspirada en Adolfo Suárez.
Madelman acaba de mandar al presidente al espacio…
APARECE UN NUEVO MODELO, MORENO, Y DE ASPECTO MEDITERRÁNEO, SOSPECHOSAMENTE PARECIDO AL PRESIDENTE ALFONSO SUÁREZ. DE HECHO, ASÍ SE CONOCE ENTRE LOS COLECCIONISTAS: EL MADELMAN TIPO SUÁREZ