EL SUPERVIVIENTE DEL HORROR
En 1939 el barcelonés Josep Sala tenía dieciocho años y servía como sanitario del Ejército republicano. Detenido por las fuerzas franquistas, inició una odisea por los campos de concentración –había cerca de 300– que mancillaban la península Ibérica. Pasó por el de Zaragoza y los leoneses de Santa Ana y San Marcos y sobrevivió a las más duras condiciones: el frío, la enfermedad, el hambre… A sus cien años, la envidiable memoria de Sala reconstruye para Historia de España y el Mundo su experiencia, una experiencia que fue voluntariamente omitida de los libros y que un ensayo de Carlos Hernández, Los campos de concentración de Franco, ha traído a la luz.